Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

sábado, 29 de noviembre de 2008

La toma de Cullera

http://www.geocities.com/base_manises/index1.html


En Jefatura había siempre, es un decir, un cabo y cuatro soldados de guardia. Estos a su vez, dependían de un sargento al que llamaban La Mejillona. Todos adscritos a la Base. Fuera del horario oficial, allí podía ocurrir cualquier cosa, esa incluida.

Una noche, dejamos a dos de guardia y en dos coches, y uniformados, nos fuimos a Cullera. Monté en el de Juan Fayos, un colega de Fabareta. El coche, era un citroen como el de la película de Gracita Morales, parecía que a cada curva iba a volcar. La carretera era estrecha, llena de curvas y bordeando el río Júcar. ¡Qué miedo me hizo pasar el cabronazo!. El auto parecía que a cada curva iba a dar la candeleta. Yo rogándole y amenenazándole para que disminuyera la velocidad y él, descojonándose, aún corría más.

Ya en Cullera, fuimos a asaltar bares de titis. Aquellos jovenzanos eran de la zona y deshinhibidos. A las pobres mozas, les hicieron la rata todo que quisieron. En un bar, hasta les mangaron una botella de bebida de la estantería del mostrador. Eso lo hizo, el cabo de guardia. Culminada la misión en territorio enemigo, de vuelta a casa paramos para darle un tiento a un melonar que había al lado de la carretera.

En la ciudad, en el pretil del Turia, abríamos los melones. El que no valía, al cauce. Poco después, un coche se para detrás de nosotros y alguien dijo ¡la poli!. Iniciamos la huida al mejor estilo peliculero gangsteril. Me quedé colgado de la puerta del auto haste que pude entrar mientras emprendíamos la retirada. Corta por otra parte, pues estábamos a 300 metros de Jefatura. Los presuntos policías, sabe dios quienes serían; o no lo eran o como éramos del gremio no nos molestaron.

Fray citroen, por un exceso de confianza, a punto de licenciarse tropezó con la generala. Lo mandó al cuartel y aquellos, que le tenían ganas, en una guardia que se durmió, le quitaron el fusil y le endiñaron un mes de calabozo y lo raparon al cero (con la estima que le tenía a su cabellera). Ajo y agua; ya no se pudo jubilar a su tiempo.

Y es lo que yo digo: de todo aquél, o aquella, que te puede joder, o te mantienes a distancia o lo jodes tu primero. Cosa que, es este caso, no solo no podía ser, además, era imposible.

viernes, 28 de noviembre de 2008

la luna sobre el Aneto-Maladeta


Ramón Torres

LAS GRULLAS




No voy a escribir de estas aves sobre las cuales desconozco casi todo. Para eso están los otorrincólogos o como se llamen.

Esto viene a cuento porque anoche, alrededor de las nueve, cuando volvía a casa después de pasar la tarde con mi nieta, al ir a coger el coche escuché el clásico graznido de una formación. Me llamó la atención, como siempre, pero más en esta ocasión por ser de noche hacía horas. Prestando atención con la vista puesta hacia donde venía el sonido, descubrí , a la luz de la población, la formación en V clásica de un centenar de las mismas dirigiéndose, presumiblemente, hacia la laguna de Gallocanta.

Es increíble la capacidad de orientación de estas aves. De un año para otro, mantienen el rumbo tan bien o mejor que el más sofisticado jet comercial. Por el valle del Ebro, suelen cruzar en el otoño y la primavera en una u otra dirección según la estación. A los agricultores de Bello y pueblos colindantes a la laguna, lugar de hibernación, no es que les haga demasiada gracia la migración. Tiene su explicación. De los sembrados, obtienen el grano que según el Señor tendrán que servir de alimentación a las aves del cielo. Ellas, desconocen quien es el proveedor de su maná, simplemente se sirven pues los encuentran libres. La DGA, tiene que asumir el desaguisado de las grullas en las fincas. En los campos de maíz cosechados de Villafranca, las he visto buscando los granos caídos durante la recolección.

Al margen de sus estropicios, detractores y defensores, sobre todo en primavera alegran a quienes las contemplamos en grandes bandadas emigrando hacia el norte. Espero volver a veros pronto.

jueves, 27 de noviembre de 2008

If he can, can I ?

Mister Gonzáles, expresidente del gobierno, según el cotilleo audiovisual ha tenido a bien -aunque digo yo que la otra parte contratante de la segunda parte también habrá puesto algo de la suya- ha tenido a bien, decía, de amancebarse, arrejuntarse, liarse, con una señora de buen ver y bastante más joven que él.

Después de 38 años de matrimonio, menos de vida en común que eso es harina de otro costal, han decidido ambas partes del consorcio, tomar las de Villadiego y si te he visto no me acuerdo, hasta luego Lucas y aquí paz y después gloria.

Hombre, con tantos años de aguantarse mutuamente, está bien que se tomen unas vacaciones, exploren nuevos horizontes y se dediquen a la caza del búfalo o la avutarda. Que lo hagan jóvenes después de 5 años o menos, manda cojones.

El caso es que yo estaba sopesando la posibilidad de, emulando al presidente electo de los yunait esteits: If he can, can I ?. Y se me escurren algunos inconvenientes. El primero, la reacción de mi santa. El campo lleno de cardos, auque no le preocupa. Siempre me podría bajar a por tabaco y tomar el tranvía de la malvarrosa o perderme por las ramblas.

El segundo sería la prevención y la pereza que me causa empezar de nuevo algo. Yo, que cuando veo a algún reincidente contumaz lo más suave que le dedico es gilipollas, vería recaer sobre mí mis epítetos laudatorios. (Cuando veo una mujer por la calle, y hago alguna comparativa, pienso en el día después y no, no me veo).

Y en tercer lugar y más importante: ¿iba a poder engañar a alguna mujer que me conociera?; dicho de otra manera ¿quién se atrevería a cargar con un viejo chocho, impertinente y gruñón?. Haría falta estar pelín loca pero no de amor, pues no me siento capaz de levantar pasiones ni ganas que tengo. Lo más que podría hacer, es invitarla a pescar o dar una vuelta en la golondrina.

Así que, mejor lo dejo para otro rato. I can`t.

martes, 25 de noviembre de 2008

TACITA DE CARDO CON ALMENDRAS

Esta faena, se la dejamos a mi suegra que la borda. Vaya por delante que, cuando me dice cardo, debo esperar y ver como se maneja para adivinar a que se refiere. No se si prepara sopa ........

Compramos un cardo grande, a poder ser blanco, como para unas ocho personas. Semos más, pero algunos, con verlo, ya se saturan.

Ponemos agua a calentar suficiente como para cocer dos veces el cardo. En un barreño, agua fría con un poco de harina para blanquear. Dejamos a la madre de mi santa limpiando y troceando el cardo; asín no se aburre y además le gusta. Hecho esto, apartamos la mitad del agua que teníamos calentando en otro perolo y ponemos el cardo a hervir.(No poner la tapa a la olla rápida). Tras cinco minutos, tiramos ese agua y le añadimos la que habíamos mantenido hirviendo. Con ello, eliminamos el amargor que pudiera tener al tiempo que evitamos se nos encalle. Sal.

Tenemos dos opciones: cocerlo en la olla rápida (la grande)12-15 minutos o hacerlo por el methode traditionel, cerca de una hora. (en ambos casos, depende de la ternura).

Aprovechamos el tiempo de cocción, para preparar la salsa.

Tenemos almendas ya tostadas y sin piel. En una sartén apropiada, ponemos aceite de la virgen extra. Unos dientes de ajo cortados troceados, los doramos y apartamos (tiramos una vez han dejado el gusto). Freimos unas tostas de pan (ojo, se queman echando leshes) y junto con la almendras, las majamos en el mortero o las pasamos por el turmix. Ponemos de nuevo en la sartén esta pasta y añadimos pelín de harina para que ligue. Aclaramos con un poco de leche o nata y caldo del propio cardo (al que ya habremos cocido, y sino, esperaremos que tampoco hay prisa.com). Una vez haya hervido y comprobado que tiene la ligazón óptima, lo vertimos sobre el cardo al que ya habremos quitado todo el caldo.

Dejaremos hervir a fuego lento para que se termine de realizar la unión de los ingredientes.

MELÓN CON JAMÓN

Compramos una merluza del tamaño necesario para los comensales que se vayan a apuntar a la farra. O más si son necesarias.

Pedimos que nos las corten a rodajas, la parte cerrada o cola, y la delantera abierta, en medallones. Salamos.

Dependiendo de la cantidad, igual nos interesa usar una sartén grande para realizar los primeros pasos utilizando un recipiente mayor para la confección final. Si es posible, utilizar el mismo recipiente para todo.

Ponemos aceite, el suficiente para dar vuelta y vuelta. Vamos pasando el pescado por harina, vuelta y vuelta en la sartén para que se endurezca el exterior. Lo vamos retirando, al otro cacharro mayor. Una bandeja de horno o algo similar.

Una vez hayamos dado esta primera fase al pescado, si el aceite se nos ha quemado con la harina, tiramos todo. Si está en uso, dejarlo y añadir un poco más de ser necesario. Picamos ajo y perejil en el mortero y en el aceite caliente, lo freímos evitando se nos queme. Añadimos un poco de harina, -discrecional según volúmen-, y revolvemos con la rasera o cuchara que estemos usando. Sin que llegue a quemarse, añadimos agua o el fumé que previamente habremos preparado con las espinas y la/s cabeza/s, para obtener la necesaria salsa verde. Dejamos a punto de sal y un pelín de pimienta molida (con cuidao no vayamos a joder la salsa). Una vez comience a hervir, la volcamos sobre las rodajas de merluza (que tendremos apartadas en el otro cacharro) hasta cubrir el guiso.

Pero antes de volcar la salsa verde, añadiremos unos salmonetes, digo langostinos o gambas medianas (dos por cabeza), -los langostinos, si los pasamos previamente por la sartén, estarán más sabrosos- unos mejillones y un puñado de almejas. Unas puntas de espárragos y unos guisantes sobre la merluza.

Si disponemos de medios para darle fuego suficiente por abajo a la bandeja, -plancha o fuego-, es el momento de hacerlo, con cuidado de que no se nos agarre el fondo. No hacer demasiado, pues es poco el tiempo que necesita para hacerse bien el pescado y que la salsa tome su sabor y viceversa. Recomiendo el horno previamente calentado sin dejar demasiado tiempo en el, pues se secarían salsa, pescado y toel biribí.

El melón con jamón, eso sí, de D.O. Teruel, lo podríamos comer de aperitivo, amos digo yo.

Y un vino blanco del Somontano de Huesca, Enate o bodegas Pirineos, o de la D.O. Cariñena, Monasterio de las Viñas. Aunque hay otros muchos igual de ricos sin salir de Aragón.


TORTILLA DE ACELGAS

Cogemos media docena de huevos (o más). Separamos las claras de las yemas, las echamos en un vol y las batimos con una varilla a punto de nieve -montenevado-.

En una bandeja aparte, que soporte el calor -acero, cristal o cerámica- ponemos bizcochos de lengua de gato en el fondo y los regamos con Oporto. Seguidamente, encima ponemos una barra se helado según gusto. Un sabor o varios.

Con una manga pastelera o una espátula, colocar el montenevado cubriendo el helado, decorando según gusto. Meter al horno fuerte previamente calentado y vigilar para que se dore pero no se queme.

Sacar del horno y espolvorear azúcar sobre el montenevado ya tostado. Habremos calentado un poco de brandy -coñá- el cual verteremos sobre el montenevado nada más sacar la bandeja del horno. Prender fuego hasta que la llama se apague.

Servir.

Cantidades de ingredientes: según comensales y ganica de golosinear.

lunes, 24 de noviembre de 2008

No ver, no tocar.

Cuando me lancé al proceloso mar de la navegación por Internet, lo hice con la alegría e inconsciencia del novato. Como en todos los ámbitos de la vida, se dan todo tipo de incidencias. Si bien es verdad que antes había más frescura, más posibilidades de relación personal, menos aglomeraciones y menos saturaciones que ahora.

No voy a relatar a pie juntillas las aventuras del barón de Munchausen. Pero intentaré al menos ajustarme a lo que he "visto y oido".

La primera conexión que tuve, fue a través de la tarifa plana de Terra. Solía visitar los foros. De ahí pasé a los chats que son en vivo y más dinámicos e interesantes. Aquí, como estamos de todo, de todo se halla, convergencias y divergencias asonantes. Se puede coincidir e intimar dependiendo del grado de implicación que cada cual esté dispuesto a asumir.

Acabas hasta el gorro de las manidas preguntas de rigor que con toda seguridad alguna vez los navegantes hemos "escuchado". Lo cual, poco a poco, a mí me alejó de los mismos. No se si me he tornado cascarrabias o susceptible, pero ya no aguanto una "conversación" con alguien desconocido a quien no aporto nada.

Si en algún momento las cosas iban demasiado lejos, exhibía mi lema de navegante: no ver, no tocar. Recuerdo especialmente lo que en una ocasión me enseñó una amiga chatera: "donde tengas la olla, no metas la polla". Jajajajaja, qué verdad es. Ella, era hostelera y se le habían liado y largado la somelier y el cocinero. ¿Qué podía esperar si los había alojado a los dos, solos, en un piso de su propiedad?.

Aunque no todo el mundo lo ha tenido claro, o sí, a muchos los ha atrapado la red. Conozco algún caso. Sin embargo, habría que decir aquello de "quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra".

Cuando descubrí los blogs, me olvidé de todo lo demás. Aunque sea en un lenguaje pueblerino y tosco, me gusta escribir y contar las aventuras del abuelo Cebolleta. Con ese lema, es muy difícil conseguir y mantener un partenaire que, estando dispuesta/o a tener una cierta intimidad y complicidad, esta no conlleve una esperanza de conocimiento a corto o medio plazo.

Una comunidad bloguera, te permite visitar a quienes, en sus escritos, manifiestan una cierta concurrencia por su forma de expresión. Sin excluir, supongo, un contacto personal entre sus miembros, a través de las "quedadas" para quienes de ello gusten, como los chateros

Una hija..........

Una hija se quejaba a su padre acerca de su vida y como las cosas le resultaban tan difìciles. No sabía como hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.

Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejo hervir sin decir palabra. La hija espero impacientemente, preguntándose que estaría haciendo su Padre.

A los veinte minutos el padre apagó el fuego; Sacó las zanahorias y las colocó en un recipiente. Sacó los huevos y los colocó en un plato.
Coló el café y lo puso en una taza. Mirando a su hija le dijo:
"Querida; ¿Que ves?" "Zanahorias, huevos y café; fue su respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias.
Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Al sacarle la cáscara, observó que el huevo estaba duro.
Luego le pidio que probara el cafe?. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.

Humildemente la hija preguntó: "¿Que significa esto, Padre?"
El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente.
La zanahoria llegó al agua fuerte, dura. Pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al agua fragil. Su cascara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido.
Los granos de café? sin embargo eran los únicos. Después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.

"¿Cual eres tú?", le preguntó a su hija. "Cuando la adversidad llama a tu puerta", ¿cómo respondes? "Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?"
Y cómo eres tú: "Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza?
"Eres un huevo, que comienza con un corazon maleable? Posees un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, un divorcio o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero "Eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazon endurecido? "O eres como un grano de café? ¿El café? cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café, cuando las
cosas se ponen peor tu reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor mejoren.
¿Como manejas la adversidad?
¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de cafe?

viernes, 21 de noviembre de 2008

Los amos del mundo

Esto no es sino un intento de ayudar a difundir el artículo que el afamado escritor Arturo Pérez-Reverte, publicó hace ahora casi 10 años en la revista "XLSemanal", y que parece un predicción al mejor estilo Nostradamus.

Usted no lo sabe, pero depende de ellos. Usted no los conoce ni se los cruzará en su vida, pero esos hijos de la gran puta tienen en las manos, en la agenda electrónica, en la tecla intro del computador, su futuro y el de sus hijos. Usted no sabe qué cara tienen, pero son ellos quienes lo van a mandar al paro en nombre de un tres punto siete, o de un índice de probabilidad del cero coma cero cuatro.

Usted no tiene nada que ver con esos fulanos porque es empleado de una ferretería o cajera de Pryca, y ellos estudiaron en Harvard e hicieron un máster en Tokio -o al revés-, van por las mañanas a la Bolsa de Madrid o a la de Wall Street, y dicen en inglés cosas como long-term capital management, y hablan de fondos de alto riesgo, de acuerdos multilaterales de inversión y de neoliberalismo económico salvaje, como quien comenta el partido del domingo.

Usted no los conoce ni en pintura, pero esos conductores suicidas que circulan a doscientos por hora en un furgón cargado de dinero van a atropellarlo el día menos pensado, y ni siquiera le quedará a usted el consuelo de ir en la silla de ruedas con una recortada a volarles los huevos, porque no tienen rostro público, pese a ser reputados analistas, tiburones de las finanzas, prestigiosos expertos en el dinero de otros. Tan expertos que siempre terminan por hacerlo suyo; porque siempre ganan ellos, cuando ganan, y nunca pierden ellos, cuando pierden.

No crean riqueza, sino que especulan. Lanzan al mundo combinaciones fastuosas de economía financiera que nada tiene que ver con la economía productiva. Alzan castillos de naipes y los garantizan con espejismos y con humo, y los poderosos de la tierra pierden el culo por darles coba y subirse al carro.

Esto no puede fallar, dicen. Aquí nadie va a perder; el riesgo es mínimo. Los avalan premios Nóbel de Economía, periodistas financieros de prestigio, grupos internacionales con siglas de reconocida solvencia. Y entonces el presidente del banco transeuropeo tal, y el presidente de la unión de bancos helvéticos, y el capitoste del banco latinoamericano, y el consorcio euroasiático y la madre que los parió a todos, se embarcan con alegría en la aventura, meten viruta por un tubo, y luego se sientan a esperar ese pelotazo que los va a forrar aún más a todos ellos y a sus representados.

Y en cuanto sale bien la primera operación ya están arriesgando más en la segunda, que el chollo es el chollo, e intereses de un tropecientos por ciento no se encuentran todos los días.

Y aunque ese espejismo especulador nada tiene que ver con la economía real, con la vida de cada día de la gente en la calle, todo es euforia, y palmaditas en la espalda, y hasta entidades bancarias oficiales comprometen sus reservas de divisas. Y esto, señores, es Jauja.

Y de pronto resulta que no. De pronto resulta que el invento tenía sus fallos, y que lo de alto riesgo no era una frase sino exactamente eso: alto riesgo de verdad. Y entonces todo el tinglado se va a tomar por el saco. Y esos fondos especiales, peligrosos, que cada vez tienen más peso en la economía mundial, muestran su lado negro. Y entonces -¡oh, prodigio!- mientras que los beneficios eran para los tiburones que controlaban el cotarro y para los que especulaban con dinero de otros, resulta que las pérdidas, no.

Las pérdidas, el mordisco financiero, el pago de los errores de esos pijolandios que juegan con la economía internacional como si jugaran al Monopoly, recaen directamente sobre las espaldas de todos nosotros. Entonces resulta que mientras el beneficio era privado, los errores son colectivos y las pérdidas hay que socializarlas, acudiendo con medidas de emergencia y con fondos de salvación para evitar efectos dominó y chichis de la Bernarda.

Y esa solidaridad, imprescindible para salvar la estabilidad mundial, la pagan con su pellejo, con sus ahorros, y a veces con sus puestos de trabajo, Mariano Pérez Sánchez, de profesión empleado de comercio, y los millones de infelices Marianos que a lo largo y ancho del mundo se levantan cada día a las seis de la mañana para ganarse la vida.

Eso es lo que viene, me temo. Nadie perdonará un duro de la deuda externa de países pobres, pero nunca faltarán fondos para tapar agujeros de especuladores y canallas que juegan a la ruleta rusa en cabeza ajena.

Así que podemos ir amarrándonos los machos. Ése es el panorama que los amos de la economía mundial nos deparan, con el cuento de tanto neoliberalismo económico y tanta mierda, de tanta especulación y de tanta poca vergüenza

jueves, 20 de noviembre de 2008

ALBA

Recientemente, nos dejó el tío Martín. Casó con la tía Aurelia siendo yo casi un enano. Era de Alba, donde han vivido siempre. Por ello, yo he ido muchas veces a su casa. A campo través, o casi. Tres horas en el tren de san Fernando. A veces, iba con la abuela. Otras, solo. Volver a casa, siempre me costaba llorar. Mis primas, eran la pasión de la abuela. "Ay mi escoboncico pequeño" decía, cuando mencionaba a Asunción, también prematuramente desaparecida. Y cuando volvía al pueblo y quería llamar a los de siempre: "Asunción, Amor, cojones" porque no le salía el nombre nuestro.

Cuando subía o bajaba, yo, si el tiempo lo llevaba, me dedicaba a cazar nidos de cuervo o picaraza por los chaparros. Pero en los del pueblo. Al bajar, después de las subidas y bajadas de los terrenos del término de mi pueblo, hay una extensión, Las Navas, totalmente llanos y sin vegetación de altura. Al atravesarlas, se ve por una parte el terreno sinuoso de Peracense con el cerro de san Ginés como protagonista y guardián al fondo, y las minas de Ojos Negros a la derecha. De la otra parte, el monte de chaparros, el valle del Jiloca y al fondo, la sierra de Palomera.

Este monte de chaparros, yo lo pasaba como alma que lleva el diablo. Tenía miedo, el cual me daba alas. Sobre todo porque, ya cerca de Alba, había una cruz de piedras sueltas en el suelo, donde decían que habían matado a un pastor. Cuando finalizaba la chaparrada, tanto al subir como al bajar, me volvía para atrás (a ver si venía alguien) y qué alivio sentía al ver las murallas del castillo, en Alba, o el cerro de san Ginés.

Siempre recordaré su despedida. Echábamos un trago de vino del porrón y decía: "despídete de la maña Isabel, que la mato". Frase que debió escuchar a algún vecino de su pueblo. Por cierto que, con esto del porrón, hice una vez un comentario (ya se sabe que los críos todo lo cascan); algo así como "en casa del tío Martín siempre saca el porrón lleno y la tía Adoración (hermana de mi abuela) solo saca un vinajero". "Joder, con el crío de los cojones" decía la tía.

Y un día me pasó un caso terrible (para mí en ese momento lo fué). En aquel tiempo, había muchas vacas en ese pueblo. Iba yo con mi madre y mi tía y al volver una esquina me dí de bruces con una pacífica vaca. ¡Dios qué pánico me entró!. Me vuelvo y echo a correr, veo una puerta abierta y me meto dentro. La vaca detrás de mí. Me subí a un pesebre chillando y llorando. Era el establo del animal. Hasta que me rescataron, que mal lo pasé. Ellas aún lo recuerdan, divertidas, ¡¡yo también!!.

Años más tarde, en Benicassim, donde son muy aficionados a las vaquillas sueltas en circuito cerrado por el pueblo, me encontré en una situación indeseada y no buscada. Veo que viene la vaquilla por la calle, sola, y me preté en el portal de una casa. Pasó de largo porque no me debió localizar. El susto que me pegué, aún hace que me angustie al contemplar las consecuencias de lo que me pudo haber pasado ya que no había nadie para socorrerme.

Y es que los cuernos, me han dado siempre un pánico tremendo.

martes, 18 de noviembre de 2008

Nostalgia

Mi pueblo se halla a una altitud de 1200 m. En plena Sierra Menera, a los pies del cerro de san Ginés su cumbre máxima, 1640 metros.

El sábado, hacía una tarde estupenda. Salí a ventilarme al Llano y a contemplar esas montañas que ya forman parte de mi mismo. Un sol generoso y amable y un cielo azul y diáfano. El pueblo está ubicado en un valle que contempla allá al fondo, a unos diez kms., las escombreras de las minas de hierro de Ojos Negros, hace tiempo cerradas. Hoy coronadas por aerogeneradores en la zona de Castilla.

El silencio casi hacía daño a los oídos. Solo roto de vez en cuando por el graznido de algún cuervo o el cencerro de alguna oveja de un rebaño que se presumía no muy lejano. Tanta paz, casi acojona pues da sensación de soledad. El humo salía pausadamente de las chimeneas en las casas que aún permanecen habitadas. En esta época, van quedando vacías muchas de ellas.

En los rollos de paja, ciento y pico kilos cada uno, al final encontré setas que era lo que había ido a buscar. Me acerqué a un chaparro cercano a ver si tenía bellotas. Llené un bolsillo de ellas; (se escuchan tres tiros de un cazador, lo cual hace presumir que la pieza se ha ido a criar (me alegro));luego en la estufa, asé varias, como si fueran castañas. Estaban ricas. Reminiscencias de otros tiempos, ni mejores ni peores, diferentes, pero nuestros.

En el castillo, varios visitantes se habían encaramado a lo más alto de sus almenas. Los coches, aparcados en la entrada.

Como en casi todas partes, la puta política hace irrespirables las relaciones interpersonales. Al tiempo, los putos políticos, lo envenenan y exprimen o abusan todo.Otrora compinches, ahora enemigos. El alcalde ppero (¿como será posible que cuanto más miserables son, sean más reaccionarios? ¿porqué quienes cobran del contribuyente, acaban por confundirse con el estado?), ha convertido en su particular rancho el municipio. Hace y deshace lo que le pasa por los ovarios. Era un muerto de hambre y un perro; hoy nada en la abundancia, pero no gracias al trabajo. Y el nepotismo, está a la orden del día. Mas no hay cojones para echarlo o enjuiciarlo. Quizá pase como con el rácimo de uvas del ciego del Lazarillo de Tormes............

Si eso pasa en una mierda de municipio, que no pasará en las grandes ciudades o en los gobiernos autonómicos, o en el gobierno nacional, o en las financieras, o.............

jueves, 13 de noviembre de 2008

Incierto futuro

General Motors recortará un 20% la producción de la planta de Figueruelas.

Se me hace muy difícil de comprender, sin emplear palabras que asustarían hasta a esta página en blanco, como es posible que una empresa que en la primavera trabajaba todos los sábados por horas extras, radicalmente cambió en el mes de Junio pasando a endosar a los trabajadores días de paro técnico, los cuales siguen hasta final de año, para llegar a un ERE aplicado a 600 trabajadores desde el 1º de Noviembre.

No cabe duda de que el capitalismo es el responsable último de toda esta vorágine originada en la economía mundial. No solamente ha actuado con codicia, sino que también con una irresponsabilidad delictiva. A todos los niveles empresariales. Desde sueldos mafiosos en sus dirigentes, gabelas de todas clases, indemnizaciones vergonzosas...... Aquí en España, mientras la CEOE suspira por el despido libre sin indemnización para los trabajadores, a quien había ejercido de secretario general de la misma con Cuevas, un tal Giménez Aguilar, lo han "despedido" con un regalo de 45 días por año trabajado. Y eso solo es el chocolate del loro comparado con el pastón que se embolsa el presidente del BBVA.

GM, ya se embolsó una pasta para que el Meriva viniera a Zaragoza y no se lo llevaran a Gliwice en Polonia. Ahora, han traído de jefe a un polaco. Sospechoso ¿no?, y comienzan los problemas de nuevo otra vez. Las multinacionales automovilísticas, se pusieron de acuerdo para todas, el mismo día, anunciar sus respectivos ERES. GM, FORD, WW, NISSAN, PEUGEOT.... Ahora, al unísono, reclaman dineros estatales para lograr sobrevivr, según ellas.

OPEL (GM Europa), está montando o ha montado una planta polivalente para construir automóviles en Rusia por un importe de 300 MM de €. ¿Para eso no tiene problemas de liquidez? ¿De dónde han salido esos millones que dicen que no tenían? ¿Qué % de esa inversión ha salido de la planta de Figueruelas tanto en beneficios como en exacciones fiscales o ayudas directas del estado y de la Comunidad?.

Tenemos un gran problema. Mientras los políticos, muchas veces conniventes cuando no instigadores, en vez de hacer una limpieza ejemplar entre las cúpulas empresariales mafiosas y corruptas, se dediquen a insuflar miles y miles de millones, ya sean $ ó €, sin exigir responsabilidades pecuniarias y penales a esas cúpulas, seguiremos en la misma corrupción, miseria y desorden que irá acrecentándose en tanto los problemas crezcan conjuntamente con el paro, el hambre y la miseria globales.

Cuando Richard Wagoner y Carl Peter Foster anuncien que se rebajan el sueldo al nivel de un operario de línea de montaje, en tanto OPEL/GM no entra en números negros, podrán mirar a la cara a los miles y miles de trabajadores a los que les están arruinando la vida. Sino suceden ambas cosas, tenemos todo el derecho del mundo a llamarles sinvergüenzas y correrlos a gorrazos.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

E. MATEO

No podría definirlo como amigo, pero tampoco de lo contrario. Somos de la misma añada; él, un mes más joven. Según mi señora madre, al nacer tuvo problemas, los cuales, desgraciadamente, han repercutido a lo largo de su vida en su conducta. Cuando íbamos a la escuela, siempre estaba castigado a la hora de los recreos. Con él, nunca se podía tener la fiesta en paz.

Un año, para san Blas que eran las fiestas, yo habría estrenado un abrigo y el muy cabr.. me empujó y me tiró al agua de la rambla dejándonos a ambos, abrigo y yo, hechos una mierda. No tendríamos más de 5 años.

Otra. Estábamos jugando en el frontón y alguna pifia nos hizo. El caso es que echó a correr calle abajo hacia su casa y yo le tiré una piedra con tan buena puntería, que a unos 30 metros a la altura de la casa de mis abuelos, le alcancé en toda la coronilla, haciendo la piedra un ruido perfectamente audible. Me imagino que después su madre armaría el consiguiente alboroto. A su tía, que vivía vecina, de una pedrada le mató el gallo. Bueno, siempre haciendo rastros. Y el resto de críos, no queríamos "ajuntarle" porque siempre montaba algún pollo.

En nuestros años adolescentes,nuestros padres tenían el azafrán lindante. Era un espectáculo por las mañanas al amanecer. No se veía ni jurar y ya su padre animaba a la cuadrilla a la hora de coger la rosa: "poneros aquí cara la luz del día, cara la luz del día". Su madre, creo me tenía algo de ojeriza. D.E.P. ambos.

Ahora, cuando va por el pueblo, todos le temen. Los huertos, son todos suyos. No le falta de nada. Lo que necesita, lo pilla y se lo lleva. A mi padre, no hace mucho, le mangó troncos de leña para la estufa. Cosa que me extraña pues le ha tenido, y a mí, un respeto inusual.

Este año, según me cuentan mis padres, en unos hortales algo separados del pueblo, afanaron dos sacos de pimientos y unas 50 ó 60 cebollas. ¿Alguien que le harían falta?. Menos mal que hacía unos días que se había marchado.

Como dirían las abuelicas, "malimpiau hijo".

Sirva esto como recuerdo y no como censura a su persona.

martes, 11 de noviembre de 2008

Peñíscola

La primera vez que conocí Peñíscola, fue para la inaguración del hotel Hostería del Mar.

La llegada en el bus procedente de Benicarló permitía ver desde varios kms. antes la silueta del castillo y el pueblo recortándose sobre el cielo azul del mes de Junio. Donde antes existían marismas y cerros, ahora adosados, apartamentos y bloques de casas. No existía le explotación y sobresaturación turística de hoy. De hecho, el hotel, estaba aislado a un km. del pueblo y solamente había un edificio de apartamentos entre ambos.

Subíamos por las noches al pueblo a dar una vuelta. La carretera, a oscuras. Una noche nos encontramos con los civiles y como ocupábamos toda la calzada, nos quisieron perjudicar. El sr. Romea, debió sacarnos las castañas de fuego.

La piscina del hotel, estuvo a punto de costarme un disgusto. Una noche estábamos bañándonos y perdí pie. ¡Ay joder! ¡¡socorro!! ¡¡que me ahogo!!, los otros, ni puto caso. Al final, no sé si fue porque me hice a la idea de que si no era buceando no salía o porque un colega se tiró, conseguí salvar el pellejo. ¡Menudo susto me llevé!. Ahora, antes de meterme al agua, averiguo la profundidad. No he conseguido aprender a mantenerme a flote. Soy un negao.

En una acequia que pasa por la trasera del hotel, pescábamos anguilas así como en el lago del pueblo; no podía aspirar a más pues era, y sigo siendo, más inofensivo que un sidral.

Me enamoré de Peñíscola. Castillo y sede de mi paisano el Papa Benedicto XIII (creo). El Papa Luna. Otro chanchullo gordo de los muchos que ha protagonizado la Iglesia a lo largo de los siglos.

He vuelto muchas veces; su playa, para mí, es la mejor de las que conozco. Ahora, todos los años voy a menudo. Mi osera, queda cerca. Eso sí, cuando no hay aglomeraciones. El primer domingo de Agosto, hacen unos fuegos artificiales en la playa maravillosos. Me encanta verlos sentado en la arena. Y es que en el fondo, sigo siendo un niño.

domingo, 9 de noviembre de 2008

GORRIONES





Son los pájaros inseparables de todo lugar donde el ser humano habite. Son, sin duda, el recuerdo más primitivo que, de ser posible, emitiría mi memoria auditiva y visual (las personas aparte).

En mi adolescencia, los gurriatos formaban parte de la geografía cotidiana de los zagales. Siempre presentes, inaccesibles e inalcanzables, maquinábamos la forma de echarles el guante de la manera que fuera: simples pedradas -inútiles siempre-, cepos -a veces se cogía alguno pues son muy desconfiados-, cazar los nidos cuando las crías estaban a punto de abandonarlos y como no, el tirador o tirachinas. Me recuerdo en todas y cada una de las facetas de depredador.

Con los cepos, la época más idónea eran las nevadas en el corral. Una vez cogí dos gurriatas a la vez en un cepo. No me atreví a matarlas y las solté.

El tirador, era nuestra nuestra compañía y divertimento veraniego. Las crías de gorrión, se quedaban en los árboles piando. Desde el suelo, lanzábamos la piedrecilla convertida en proyectil y alguna vez acertábamos.

Años más tarde, en los días invernales, recuerdo a los árboles desnudos en la fachada de la Facultad de Medicina. Por la noche, rememorando las aventuras juveniles, me hacian sentir fascinado los cientos de gorriones convertidos en bolas de algodón que, pasando la noche en sus ramas, decoraban como bombillas su desnudez. Solo les faltaba la luz.

Esta mañana, al ver unos cuantos en un paraje que poco tiene que ofrecer en alimentos, me ha impulsado a escribir este post. Sin duda, son unos supervivientes.

sábado, 8 de noviembre de 2008

bitácoraclandestina

Quienes persiguiendo no sé qué o huyendo de no sé dónde, llevamos un tiempo pululando por los etéreos espacios de Internet, nos hemos encontrado con alguna que otra sorpresa. Unas veces buena y otras no tanto.Si además, partes creyendo que todo el monte es orégano, puedes acabar cogiendo ortigas, confundiéndolas con zanahorias, o sentándote directamente en ellas (con el culo al aire, claro).

Tenía, y tengo, un blog en Terra. Ante las crecientes dificultades para entrar, opté por abrir un blog en La Comunidad de El País. Con la misma temática pardilla e inocente. Enseguida comprendí que ese no era el lugar más idóneo para exponer mis "aventis". El nivel de "los comunitarios" en muchos casos es muy elevado: poesía, relatos, fotografía, etc., con extremistas y trolls incluidos.

Uno de los participantes que me leía y comentaba fué bitácoraclandestina. Mi estilo naïf, la mayoría de las veces, era muy diferente al suyo que no comprendía. Los consideraba absurdos, pero no de una forma peyorativa, sino por su contenido que se me escapaba. Pero valoraba su gran capacidad de inventiva y que yo no alcanzaba siquiera a vislumbrar. A pesar de nuestros diferentes estilos, o por eso, surgió una corriente positiva entre ambos blogs.

Escribió un post sobre un buitre que le robaba las sandalias a un niño y luego desde el aire lo arrojaba al vacío. Yo, a mi vez, escribí otro post salvando al niño de morir estrellado contra el suelo. No se enfadó. Celebramos el final feliz, pero no logramos quitarle las sandalias al ave, el cual sigue con ellas.

Sin darme cuenta, desaparecieron sus post y comentarios e incluso su avatar. Solo queda el blog, vacío, sin explicación alguna. Espero haya sido voluntaria su baja. Le echo de menos.

Por mi parte, y quizá por diferente motivo, también he vaciado mi blog de La Comunidad de El País. Hace tiempo abrí otro blog en Google.Blogspot. Este es técnicamente impecable, pero al ser global, es más difícil relacionarse -o yo no lo entiendo- con páginas afines. Es un poco triste, nadie te molesta, pero es garantía, ante el mal funcionamiento de terra, de que no se pierden mis post.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Tan legal como estúpido

A un ciudadano español le matan una hija de 15 años, después de haber sido sometida a repugnantes vejaciones. Su mujer, a consecuencia del dolor, fallece. El ciudadano, razonablemente destemplado, acusa a la Guardia Civil, a la Policía, a los jueces, y a todo el que se ponga por delante, porque debe ser duro asumir que ni el que cometió crimen, ni los posibles instigadores, hayan sido detenidos. Ahora, la Justicia Española, tan lenta como insensata, ¡16 años después!, quiere juzgar a ese padre trastornado para el que pide 16 años de cárcel, tantos como los que han transcurrido desde el horrible crimen. Ya decía Pitigrilli que la mejor cualidad de un juez es que tenga sentido común y, si sabe algo de Derecho, mucho mejor, pero aquí parece que han crecido los fiscales que saben mucho de Derecho, pero están ayunos en sentido común. Me gustaría conocer la reacción de esos sabios de la Jurisprudencia que forman el Ministerio Fiscal, de haber perdido una hija de 15 años, y a su mujer. Tengo curiosidad por saber cómo habrían reaccionado, y cómo estaría su dignidad, ahora tan herida.

Naturalmente, la acusación de injurias y calumnias está basada en la legalidad. Y que el comportamiento del padre de la hija asesinada, y de su abogado, no es ejemplar, es evidente. Pero la reacción mentecata del Ministerio Fiscal, intentando encerrar durante ¡16 años! a quien un crimen horrible le destrozó la vida es una de las majaderías más solemnes y ridículamente prosopopéyicas de las que hemos tenido noticias en los últimos años.

07/11/2008 LUIS del Val. Periodista

El Periódico de Aragón.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Relato inesperado





Dejamos a aquel horrible gallinazo intentando calzarse unas sandalias. ¡Qué absurdo! ¿De dónde las habría sacado? ¡Qué patoso! solo hacía que dar vueltas alrededor del calzado e intentar meter sus patazas en ellas. Todo en vano. Seguro las había robado.



Habían atravesado un vergel que sin embargo carecía de agua o manantiales donde poder saciar la sed, suya y de los animales que les acompañaban. El desértico panorama que más adelante se divisaba le hizo preocuparse. ¿Cómo iban a sobrevivir en aquel inhóspito y duro terreno?



Comenzaron a subir las dunas de arena que sin embargo eran duras; la arena no cedía al ser pisada. Al coronar la de más altura, el paisaje que se ofrecía a sus ojos era para no dar crédito a los mismos. De la ladera de un montículo de arena, surgía un manantial que se convertía en riachuelo más adelante. Pero no era la única sorpresa.



Sin dudarlo, se lanzaron a disfrutar de aquel inesperado hallazgo. El agua, era cristalina y fresca pero, no calmaba la sed. Mas pronto se sintieron ahítos y calmado su apetito, tal que si hubieran disfrutado de un pantagruélico banquete.



Sigueron su camino encontrándose en una vaguada una jaima de beduinos. Estos les ofrecieron viandas. Hambre no tenían, pues el agua les había saciado; despreciar la comida, hubiera sido una afrenta a la hospitalidad ofrecida. Se miraron estupefactos. Aquellos alimentos, iban aplacando su sed a medida que los degustaban. Y a la sombra de la jaima, el calor era axfisiante mientras que al sol, la fresca brisa hacía agradable y placentera la permanencia.



El buitre, en la ladera de una duna, seguía dando tumbos enredado en las zapatillas. Una manada de pirañas salidas del riachuelo, o punto estuvieron de dejar sin usuario al calzado y sin plumas al gallinazo. El bicho, salió ladrando despavorido.







(Dedicado a bitácora clandestina).

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Je t`aime

He estado reflexionando sobre la posibilidad de morir de amor y la verdad, aparte de mí, no logro encajar a nadie en la categoría de candidato.

Pienso en Diego Mansilla e Isabel de Segura y llego a la conclusión de que Hartzenbuch no nos contó la verdad.

Conozco una pareja que lleva 60 años de convivencia en común. Gruñéndose, pero incapaces de estar el uno sin el otro. En estos casos, ya no se muere de amor sino de viejo o de soledad (¿o sí?).

Se han dado casos últimamente de ancianos que hartos de ver sufrir a sus parejas, les han dado muerte. Triste final para una historia de ¿amor?. Sin embargo, la jauría, lejos de tratar el tema con un mínimo de delicadeza y objetividad, analizando el porqué del suceso, da su veredicto inmediato e inexorable: otro crimen machista. Aunque nunca una muerte tenga justificación.

Esta sociedad actual, es más propensa a matar "por amor" que a morir por esa causa. Es más posible morir persiguiendo una quimera, que hacerlo junto a ella.

Juan Adriansens mencionaba que "una pareja sobrevive en tanto que en la cama se entiendan". ¡Pues no hace años que sé eso yo sin necesidad de ir de plató en plató!.

Aún recuerdo como en mi juventud mi tío hacía el siguiente comentario: "de tanto que se quieren, no se pueden ver". Ese "odio", ha credido exponencialmente, pero es irredento.

Y hay una afirmación, que aunque no venga a cuento es cierta: el lobo sueña con comerse a Caperucita, pero acaba devorando a la abuelita.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Tortilla de acelgas

Cogemos media docena de huevos. Separamos las claras de las yemas, las echamos en un vol y las batimos con una varilla a punto de nieve -montenevado-.

En una bandeja aparte, que soporte el calor -acero, cristal o cerámica- ponemos bizcochos de lengua de gato en el fondo y los regamos con Oporto. Seguidamente, encima ponemos una barra de helado según gusto. Un sabor o varios.

Con una manga pastelera o una espátula, colocar el montenevado cubriendo el helado, decorando según gusto. Meter al horno fuerte previamente calentado y vigilar para que se dore pero no se queme.

Sacar del horno y espolvorear azúcar sobre el montenevado ya tostado. Habremos calentado un poco de brandy -coñá- el cual verteremos sobre el montenevado nada más sacar la bandeja del horno. Prender fuego hasta que la llama se apague.

Servir.

Cantidades de ingredientes: según comensales y ganica de golosinear.

domingo, 2 de noviembre de 2008

NO ESCARMIENTAN

El Cotilla Matutino.

México DF.- Según comunica nuestro corresponsal, en la pasada noche se han producido grandes destrozos en los cementerios de Torrero y La Cartuja. Puesto en contacto con los mediums/corresponsales allí destacados de forma permanente, le han comunicado que la algazara se ha generado y degenerado entre partidarios y detractores de la pasada Expo y sobre todo, de la futura Exponabo del 2014.

Las flores depositadas ayer por los familiares de los inquilinos y alguna que otra lápida, han sufrido las consecuencias. Según rumores, quienes más se han significado han sido los antiguos propietarios de la huerta de Las Fuentes, opuestos a que sus herederos conviertan sus campos en pelotazos urbanísticos con la escusa de la Exponabo, y ex representantes políticos y del ladrillo..

Personado en el lugar el regidor municipal, ha ordenado que a todos los rebeldes se les confine en una fosa común acorazada y blindada, eso sí, todos perfectamente identificados y numerados, hasta pasada la Exponabo en previsión de que pudieran volver a las andadas.

Aprovechando el diluvio que hoy está cayendo sobre la ciudad, ha decidido que permanezcan cerradas al público las instalaciones, hasta tanto los servicios municipales no pongan orden en ese tremendo patio de monipodio en que se han convertido ambos camposantos. Así, los visitantes y familiares, se evitaran el sonrojo de ver el comportamiento de sus deudos. (Aunque alguno ya dió muestras de ello en vida).

Paseo nocturno

Después de la última gran movida y de la posterior escandalera montada, habían decidido dejar que las aguas se remansaran. Por ello, no fué hasta la noche del 1 al 2 de noviembre que volvieron a salir a dar una vuelta por el recinto.

Y como no, observando la suntuosidad de las flores, para con mayor o menor mala folla cotillear si a fulanita este año la habían olvidado o a menganito le habían venido a ver con gran surtido de lagrimeos.

Pero cada uno, para sus adentros, había tenido la oportunidad de hacer recuento de los afectos y su efectividad. Y sí, del "Manolo quina falta me fas esta nit" del año pasado a la pedorreta ante su foto del actual, a más de uno/a le hicieron convencerse de que "a rey muerto, rey puesto". Solo quienes no tenían "pare ni mare ni perrico que les ladre" volverían más o menos "alegres" que el resto de las noches. El resto, maldiciendo a quienes solo habían ido a cumplir. Y algunos, ni eso.

sábado, 1 de noviembre de 2008

CALAVERAS O CALABAZAS

A pesar de que el plan Marshall nos trajo a las escuelas leche en polvo y queso enlatado -que por cierto, estaba buenísimo- me quedo con la costumbre que teníamos los críos de entonces llegadas estas fechas. Tal día como hoy, Todos los Santos, cogíamos calabazas y las vacíabamos imitando una calavera (sería por las que habíamos visto), luego, por la noche, una vela en su interior y a colocarlas en cualquier sitio procurando que asustara a alguien.

Hoy en día, esta costumbre ha degenerado de tal forma que se ha americanizado hasta en el nombre. Y es que hay gente pa tó. Aunque sea mierda, lo asumen porque es forano. Y eso no.

Una de las cosas que se han perdido por estas fechas es la representación de don Juan Tenorio. Y a mí me encantaba. Vino al pueblo por estas fechas, más o menos, una compañía de cómicos ambulantes que hizo una representación de Don Juan inolvidable. ¡Cómo disfrutamos! Eran excelentes actores y muy bien preparados y nosotros unos espectadores que aquello nos supo a gloria. No me importaría volver a verles a ellos representando aquella obra. Hicieron otras representaciones, pero aquella fué fabulosa.

Yo me quedo con aquellas historias.