Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

lunes, 14 de abril de 2008

vuela, vuela, palomita



Esta canción, me la cantaba mi padre, acompañándose del violín, cuando yo tenía 2 ó 3 años. La había buscado por todo internet y al final ¡EUREKA!, la encontré. Es una joya de 1938.