Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

domingo, 31 de agosto de 2008

GM "descarta" el recorte previsto de 900 empleos en Figueruelas

Después de muchos meses de preocupación y angustia, sobre todo para los posibles receptores del regalo, GM dice que no va a haber despidos, que el dinero lo necesitan para otras inversiones.

Esta es una muy buena noticia, sin duda, pero que nos debe hacer reflexionar. No es que no lo hayamos hecho con anterioridad.

Queda claro, por si alguien tenía alguna duda, que los despidos eran innecesarios e improcedentes. Solo una operación socialmente irresponsable para eliminar puestos de trabajo y trabajadores con unos salarios y antigüedad no rentables según su criterio.

Aún tenemos en la memoria los despidos del anterior ERE con la connivencia política del gobierno de Aragón. Personas ilusionadas y esperanzadas en una próxima prejubilación, a través del contrato de relevo, que vieron como se truncaba la posibilidad de un retiro sin sobresaltos.

Cuando más producción había en la fábrica, la empresa planteó la reducción de plantilla. Ahora, con una caída brusca de las ventas, según ellos, rectifican y echan marcha atrás. Eso da idea de la irresponsabilidad y el egoísmo, cuando no avaricia, de unas cúpulas demasiado bien pagadas en emolumentos y de sí mismas.

Otra más de esa irresponsabilidad es que, a estas alturas, la mayor empresa de Aragón siga sin convenio y, como denunciaba ayer un delegado sindical, incumpliendo el caducado que sigue activo. Ello es posible por el marasmo y la debilidad de la parte social que no ha podido, querido o sabido quitar la retranca que en todo momento ha exhibido la otra parte que ha impuesto, sin esfuerzos, su pauta negociadora.

Pero no nos engañemos, esto no acaba aquí ni así. Buscarán alternativas que les resulten lo más baratas posible e incluso gratuitas. La aquiescencia política del gobierno de Aragón, hará el resto. Por su intervención, tenemos un 1% de aumento salarial en este año inflacionista. Pero, caprichosos, se van de la política y aquí quedan sus defecaciones.