Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

jueves, 30 de abril de 2009

Jotas



Cuando mi era pequeño, tenía una gran voz. Pero como canta el corrido mexicano, de aquel chorro de voz solo me quedó un chiflete tras la operación de anginas. Había una jota sobre un hermano en el tercio..... que cantaba a las cuatro de la mañana, instigado por mi tía cuando iba a hacer el pan, con gran potencia y que hoy ni se me ocurriría intentar cantar.

Aún me recuerdo cantando La Campanera. Si hace siglos de eso. En el pajar teníamos el "cuarto de ensayo". La Carcelera era una jota que nos gustaba cantar. Y yo que sé. Supongo que cualquiera que se nos ocurría. Así sucedió que un día se nos hicieron las tantas. Cuando volví a casa, mi madre me arreó candela. Y eso que no había hecho ningún rastro.

Ya mozuelo o aspirante y en compañía de mis compadres, a veces, a las tantas de la mañana dábamos la cencerrada por el pueblo echando la rolda. Más o menos afinados según nos pillaba el cuerpo, esta era una costumbre secular de la mocedad. (Al tío Martín, suando era alcalde de su pueblo, algún vecino le dió la queja pues los mozos molestaban cantando de madrugada. Su respuesta fué: "como les voy a llamar la atención, si yo me iría con ellos").

Y de siempre ha sido y será cantada esta jota:

En la balsa cantan ranas
y en el palomar pichones
y en la esquina el tio Camacho
los mocitos fanfarrones


Que cuando la cosa se desmadraba cambiaban las dos última estrofas por:

y en el culo de las mozas
hecen nido los ratones



Tengo un hermano en el tercio
y otro tengo en regulares
y el hermano más pequeño
preso en Alcalá de Henares.


Carcelera si es que muero
no se lo digas a nadie
que estoy cumpliendo condena
por maltratar a mis padres


Quisiera volverme hiedra
y subir por las paredes
y entrar en tu habitación
por ver el dormir que tienes


Toda la noche he andado
pisando la nieve fría
solo por venirte a ver
rabalera de mi vida


Si piensas que no te quiero
ven y pínchame una vena
y verás mi corazón
por quien se muere de pena


Aunque tengas más amores
que flores tiene un almendro
no te ha de querer ninguno
como yo te estoy queriendo

Y más.............

martes, 28 de abril de 2009

Germán

En mi anterior post ha salido a colación el nombre de Germán unido a Benicassim. Pero lo que ahora pretendo relatar es la odisea que este hombre vivió en pos mío.

Acabada la guerra, tenía que buscar curro; como cada hijo de vecino que pretendiera llevar una vida normal, dentro de un orden. Así que me puse a ojear el periódico para ver de hallar algo que cubriera mis apetencias y necesidades. Había trabajado en Cataluña, entonces se llamaba así, y Peñíscola. El caso es que llamé por teléfono a un anuncio que había ofreciendo un puesto de cuiner en Benicassim.

Supongo que alguna referencia dí sobre el domicilio de mis tías en Sagunto. A la vista de la poca fortuna tenida, ya que no hallé nada ni aparente ni lo contrario, me subí al pueblo. Alguien vino con medio de locomoción y nos bajamos a ver a los tíos a su pueblo. Y hallándonos allí, me llaman que había venido un señor a buscarme.

Después de hablar por teléfono, pasaron algunos días y decidieron que yo ocupara el puesto de trabajo que ofrecían. Pero las comunicaciones no andaban -o corrían a la hora de cobrar, como ahora- tan abundantes como en estos tiempos multimedia. Y hete aquí al bueno de Germán indagando cual detective londinense mi paradero en Sagunto. Ya dicen que preguntando se va a Roma, cosa que el debió de seguir a rajatabla pues al final dió con el domicilio de mis tías. La gente se preocupa mucho de los demás, sino ¿como me hubiera él encontrado a mí?.

De allí subió a Teruel, a buscarme al pueblo y aquella noche, yo ya dormí en Benicassim. Ay que joderse. Era cuarentón, alegre -salvo cuando mencionaba a su cuñada, a la que no tragaba- y tenía una peluquería de señoras en Madrid que no regentaba pues el tinte le daba alergia. Una casa en Mirasierra, la cual me ofreció a mi llegada a Madrid. No sé que negocios tendrían los hermanos Almeida conjuntamente. Su hermano Enrique, era quien figuraba como dueño pero no debía serlo al 100%.......

La custión es que la Pili (la cuñá) también se me atravesó y al año siguiente, a pesar de haber empezado allí la temporada, recalé en Les Barraques, un restaurat-paellero que abrió un antiguo camarero de Enrique. Este jodido, cuando servía soupe de poissons, siempre acababa comiéndose (bebiéndose) el final de la sopera, en la cocina. Y es que me salía de maravilla, segun aprendí de César en el París zaragozano. Así que vaya este revival en memoria de todos ellos.

lunes, 27 de abril de 2009

Abstinencia....




....y ayuno

Cuando me tocó trabajar el oficio de los fogones y en la Semana Santa, para mí fué un shock sino traumático si distorsionante de mis vivencias y costumbres vividas con anterioridad. Provenía de ambientes humildes y sometidos, como la mayoría en aquellos años, a todas y cada una de las costumbres, buenas o malas, que el régimen imponía; la iglesia, era el régimen.

Así, los viernes, no se comía carne en las casas. Como si el resto de la semana no faltara en la mesa. Ayuno, lo mismo. Como si durante la semana nadáramos en la abundancia y quedáramos ahítos de toda clase de viandas y manjares. Y eso no solo fueron costumbres de aquella época. Son tan ancestrales, que aún perduran en los hogares de nuestros progenitores. La iglesia, no se da cuenta o no quiere de que sino se renueva, acabará muriendo de inanición. Cosas tan absurdas como esa, como otras muchas que tratan de imponer, resultan difíciles de asumir. Sobre todo viendo las actitudes y comportamientos de la jerarquía eclesial.

El caso es que yo, a la sazón, trabajaba en un bodegón donde entre otras cosas se servían migas y longaniza. Sobre todo por la tarde. La longaniza la fabricaban al estilo casero de siempre y las migas, la abuelica de la casa era la encargada de cortarlas y prepararlas para su consumo. Luego resultó que esta familia provenía de Calamocha y eran parientes de mi santa. ¡Manda carallo!

Mi escándalo vino cuando la noche de Jueves Santo los clientes pidieron migas con longaniza. ¡Dios mío! donde vamos a ir a parar. Al corral de las batallas con Juan Perrinchín. Yo no asumía que pudiera haber gente tan sacrílega que no respetara las costumbres. No creo me planteara si eran cristianas o no; simplemente eran eso, las costumbres. Pero claro, yo era un mandao y un trabajador.

Por situación parecida pasé en Benicassim. Recién acabada la guerra y en semana santa, vino a buscarme a casa Germán. Al que luego apreciaría de verdad. Al llegar la hora de la cena y al otro día, comprobé horrorizado como la gente pasaba olimpicamente de ayunos, abstinencias y otras menudencias. Lógico. La mayoría eran madrileños huidos de la ciudad y no iban allí a practicar ejercicios espirituales. Discotecas y otras historias, permanecían cerradas (aunque dentro hubiera gente que se conocía) y donde se practicaba......menos religión, de todo.

Y digo yo que ahora que hemos conseguido oxigenar un poco el ambiente, no debemos permitir bajo ningún concepto que los talibanes cristianos así como los muslim nos agarren de las pelotas. Llegado el caso, si hace falta, se les cortan a ellos. De este modo, no les saldrán hijos como setas (el presidente de una república sudamericana, antes arzobispo, es un follador nato con una caterva de hijos) o no se dedicarán a la pederastia.

Por cierto, tanto las migas como la longaniza, estaban buenísimas. Un día contaré como las hacíamos.

domingo, 26 de abril de 2009

PERMITIDME TUTEAROS, IMBÉCILES

Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas analfabetos de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda. Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Jefe de la patética oposición. Secretarios generales de partidos nacionales o de partidos autonómicos. Ministros y ex ministros -aquí matizaré ministros y ministras- de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera. No quiero que acabe el mes sin mentaros -el tuteo es deliberado- a la madre. Y me refiero a la madre de todos cuantos habéis tenido en vuestras manos infames la enseñanza pública en los últimos veinte o treinta años. De cuantos hacéis posible que este autocomplaciente país de mierda sea un país de más mierda todavía. De vosotros, torpes irresponsables, que extirpasteis de las aulas el latín, el griego, la Historia, la Literatura, la Geografía, el análisis inteligente, la capacidad de leer y por tanto de comprender el mundo, ciencias incluidas. De quienes, por incompetencia y desvergüenza, sois culpables de que España figure entre los países más incultos de Europa, nuestros jóvenes carezcan de comprensión lectora, los colegios privados se distancien cada vez más de los públicos en calidad de enseñanza, y los alumnos estén por debajo de la media en todas las materias evaluadas.



Pero lo peor no es eso. Lo que me hace hervir la sangre es vuestra arrogante impunidad, vuestra ausencia de autocrítica y vuestra cateta contumacia. Aquí, como de costumbre, nadie asume la culpa de nada. Hace menos de un mes, al publicarse los desoladores datos del informe Pisa 2006, a los meapilas del Pepé les faltó tiempo para echar la culpa de todo a la Logse de Maravall y Solana -que, es cierto, deberían ser ahorcados tras un juicio de Nuremberg cultural-, pasando por alto que durante dos legislaturas, o sea, ocho años de posterior gobierno, el amigo Ansar y sus secuaces se estuvieron tocando literalmente la flor en materia de Educación, destrozando la enseñanza pública en beneficio de la privada y permitiendo, a cambio de pasteleo electoral, que cada cacique de pueblo hiciera su negocio en diecisiete sistemas educativos distintos, ajenos unos a otros, con efectos devastadores en el País Vasco y Cataluña. Y en cuanto al Pesoe que ahora nos conduce a la Arcadia feliz, ahí están las reacciones oficiales, con una consejera de Educación de la Junta de Andalucía, por ejemplo, que tras veinte años de gobierno ininterrumpido en su feudo, donde la cultura roza el subdesarrollo, tiene la desfachatez de cargarle el muerto al «retraso histórico». O una ministra de Educación, la señora Cabrera , capaz de afirmar impávida que los datos están fuera de contexto, que los alumnos españoles funcionan de maravilla, que «el sistema educativo español no sólo lo hace bien, sino que lo hace muy bien» y que éste no ha fracasado porque «es capaz de responder a los retos que tiene la sociedad», entre ellos el de que «los jóvenes tienen su propio lenguaje: el chat y el sms». Con dos cojones.



Pero lo mejor ha sido lo tuyo, presidente -recuérdame que te lo comente la próxima vez que vayas a hacerte una foto a la Real Academia Española-. Deslumbrante, lo juro, eso de que «lo que más determina la educación de cada generación es la educación de sus padres», aunque tampoco estuvo mal lo de «hemos tenido muchas generaciones en España con un bajo rendimiento educativo, fruto del país que tenemos»
Dicho de otro modo, lumbrera: que después de dos mil años de Hispania grecorromana, de Quintiliano a Miguel Delibes pasando por Cervantes, Quevedo, Galdós, Clarín o Machado, la gente buena, la culta, la preparada, la que por fin va a sacar a España del hoyo, vendrá en los próximos años, al fin, gracias a futuros padres felizmente formados por tus ministros y ministras, tus Loes, tus educaciones para la ciudadanía, tu género y génera, tus pedagogos cantamañanas, tu falta de autoridad en las aulas, tu igualitarismo escolar en la mediocridad y falta de incentivo al esfuerzo, tus universitarios apáticos y tus alumnos de cuatro suspensos y tira p'alante. Pues la culpa de que ahora la cosa ande chunga, la causa de tanto disparate, descoordinación, confusión y agrafía, no la tenéis los políticos culturalmente planos. Niet. La tiene el bajo rendimiento educativo de Ortega y Gasset, Unamuno, Cajal, Menéndez Pidal, Manuel Seco , Julián Marías o Gregorio Salvador, o el de la gente que estudió bajo el franquismo: Juan Marsé, Muñoz Molina, Carmen Iglesias , José Manuel Sánchez Ron, Ignacio Bosque, Margarita Salas, Luis Mateo Díez, Álvaro Pombo, Francisco Rico y algunos otros analfabetos, padres o no, entre los que generacionalmente me incluyo.
Qué miedo me dais algunos, rediós. En serio. Cuánto más peligro tiene un imbécil, que un malvado.


Arturo Pérez Reverte en El Semanal XL

sábado, 25 de abril de 2009

ingenio o pillería


Como ya tengo escrito, la sede de Jefatura se ubicaba en la Avd. de Jacinto Benavente, junto al viejo cauce de Turia. En las proximidades, se hallaba el economato que el E.A. tenía para sus miembros. Precios ventajosos como no podía ser menos sobre todo para el jefe. Allí estaban también las cocheras donde se estacionaban los vehículos oficiales usados por el general.

Un día, tuve que ir o bien de visita o a recoger algún género. Como es normal, había soldados tanto de guardia (PA), almacenistas o mecánicos. Justo enfrente, uno de estos vigilantes, había aparcado su coche. Y llegó un vehículo a salir o a aparcar detrás suyo (tanto da para el resultado del relato y el hecho que lo motiva).

El caso es que, este auto, rompió uno de los pilotos traseros del coche del soldado por lo que inmediatamente llamó la atención al conductor. Este se disculpó y ofreció al soldado diez duros para que cambiara el piloto roto por otro nuevo. Canje aceptado.

Pero nada más marcharse, ingeniaron el colocar el piloto roto en su lugar para tratar de sacarle la pasta al próximo pringao que llegara y se le ocurriera tocarlo aparcando. Todos expectantes en espera de acontecimientos. Y todo ocurrió según lo previsto. El mirlo blanco, "rompió" de nuevo el piloto con el consiguiente escándalo y lamento de su propietario y las risas contenidas del resto de truhanes que observaban la escena.

Tras pedir escusas por el desaguisado, el conductor soltó otros diez duros por la torpeza cometida. Y ahora que pienso, me surge la duda: ¿no tendrían aquellos granujas ensayado el truco para obtener pingües beneficios de la torpeza ajena?. Me temo que me quedaré con ella por toda la eternidad.

jueves, 23 de abril de 2009

23 de Abril


Mentalmente, llevo escritos varios post sobre este día. Y ¡qué casualidad!, en todos salen los políticos a revueltas y desde luego como merecen.

Esta mañana, volviendo de darme un minipaseo para, de paso, comprar el pan, hacía memoria de los hijos de su madre que han metido la gamba, la mano y la manga en los asuntos de esta pobre Tierra Noble. (Así la denomina mi admirado Trasobares, aunque disiento de él y no porque la tierra no sea noble. Más correcto sería llamarla el Tonto Aragón).

Ayer mencionaba mi santa si no había manifestaciones por el día de Aragón. Mi respuesta fue que solo las había cuando a los políticos les interesa. En los años siguientes a la bajada a los infiernos del responsable máximo de las muertes de tanta víctima inocente, la mala conciencia de muchos y las ambiciones de poder de no menos, "nos dotamos" de un régimen al que denominan democracia, la cual no he visto por parte alguna. Excepción hecha de que ahora no son los grises quienes te ostian llegado el caso, pues visten de otros colores; y que cada cuatro años, nos tapan los ojos y la boca para seguir haciendo lo que les pasa por los cojones y despilfarrar con total impunidad nuestros impuestos. Hoy me he liao con la renta y estoy que muerdo. A mí que me lo expliquen.

Hemos tenido y seguimos manteniendo, a una pléyade de sinvergüenzas que han hecho su oficio el vivir a costa de los contribuyentes. De infausto recuerdo quienes se opusieron a que Aragón accediera a la autonosuya, ahora esos mismos miserables son agasajados y no solo eso: uno de ellos es vicepresidente del gobierno de Aragón y otro fue presidente. Y muchos más.

En años pasados, cuando el "aquí estamos, úsenos señor ansar" dicho por el entonces presidente del Tonto Aragón, esos, nos vendían al Levante, sin importarles los valles anegados del Pirineo ni sus gentes, cuando los de allí, se negaban en redondo a usar los suyos y almacenar las aguas presuntamente sobrantes del Ebro. Pero los otros, que también pretendieron hacer lo mismo -y el año pasado por decreto/ley aunque les salió el tiro por la culata- solo han usado el trasvase para joder la marrana.

Hoy, para que mi globo tomara oxígeno, veo en las noticias que Rosa Aguilar, alcaldesa de Córdoba por IU ha huido y abandona la alcaldía en busca de mejores posiciones futuras a la sombra de achilipú chavez. Pues no, yo no respeto tu decisión y mucho menos a tí. Gente sin moral, honor ni principios, o sí, de los cuales han habido muchos en esa formación y que con posterioridad la han abandonado en busca de intereses espurios personales. En toda España. Solo logran unos y otros que el ciudadano, que no el borrego, se harte y sienta náuseas ante tanta molicie y corruptela.

La guinda, la ha puesto la noticia de que los europarlamentarios italianos -¿y los españoles?- cobrarán 36.000 euros MENSUALES. ¿A cuántos mileuristas, pensionistas y pobres de solemnidad necesitamos para que alcancen ese salario anual entre todos?. Y MAFO dando la barrila con las pensiones; pero toda esa caterva de funcionarios sedicentes y millonarios no se lo aplican a sí mismos. Esto tiene que reventar. A ver si de una puta vez los ciudadanos se hartan y toman la Bastilla de nuevo. Mientras tanto, ajo y agua.

Por cierto, estoy hasta los huevos de que las tvs nacionales saquen hasta en la sopa a san Jorge y la dichosa rosita y se olviden de Aragón y Castilla León. Que se jodan, por inútiles. Aquí solo cuentan los tiros y las bombas, a los demás: ¡que les den!

De matracas y carraclas

foto: Gonzalo Bujeda. Procesión del encuentro, final de la Calleja de los Huertos, cruzando la rambla.


Años 50

En aquellos oscuros años, y no lo digo con segundas sino por lo oscuras que estaban las calles por la noche, la llegada de la semana santa suponía ¡por fin! acabar con el periodo restrictivo y de profunda recesión en el ámbito festivo. Amás amás, de la coña del ayuno y la abstinencia, (se me ocurren pensamientos impuros, je je), estaban prohibidas cualesquiera manifestaciones festivas y pecaminosas como el baile, echar la rolda a las tantas de la noche, etc, etc.

Un domingo, para festejar a un soldado de permiso, a aquellos mozos insensatos y con ganas de marcha se les ocurrió hacer baile. Llegó el cura cual Cristo en el templo, pegando gritos y se armó el belén. La gente huyendo para que no la pescara..... Como cantaría el Abuelo, así crecimos.

El cura, mosén Amable, era un poco estrafalario y estrambótico. Iba al pueblo vecino en una bici sin frenos ni guardabarros, como Cantinflas. Frenaba con el pie. Algún revolcón, sin consecuencias, se llevó al intentar subir en marcha al tren minero a su paso por el pueblo. Y era sargento, de esos militares, lo que hacía aumentar el temor de los soldados.

Pues eso. Tras el ambiente preparatorio de los viernes, -tengo vagos recuerdos de mozas y mozos echándose harina por martes de carnaval-, con vía crucis incluido y al que era obligatorio acudir, venía el Domingo de Ramos. El sacristán, tío Felipe, había preparado ramos de chaparro a modo de palmas. (Los zagales comparábamos cada ramo a ver cual era el mayor y más gallardo). El día de Jueves Santo, era fiesta a partir de las tres de la tarde. Y para los obreros, recuperable. ¡Ah! se me olvidaba, era obligatorio cumplir con parroquia. ¡Y ay de aquél que no lo hiciera!

En la ceremonia de la tarde, misa diferente, se moría Dios. Altares e imágenes cubiertas con velos morados o negros. Y las campanas, también se morían. Previamente se había montado un monumento a modo de sepulcro dentro de la iglesia, en el cual el cura depositaba el cáliz con las Hostias correspondientes. Signo del enterramiento de Jesús. Por la noche, y en riguroso turno, a velar el sepulcro todo quisqui mayor de edad. Hasta la misa del día siguiente.

Un año, bastante después, nos quedamos toda la tropa de jovenzanos a velar el monumento. Liberamos a los mayores de la obligación de la vigilia, pero de no haber tenido mejores cosas que hacer, Cristo, hubiera venido a echarnos a patadas de la iglesia. La timba que montamos en la sacristía nada tuvo que ver con el recogimiento que se presuponía en esas circunstancias. Y alguno subió a pillar palomas.



El viernes, habia de todo: completas, vía crucis -aún veo a la tía Tomasa que se lo sabía de memoria- y no se cuantas cosas más. Y como las campanas seguían "insonoras y moridas", había que darle la vuelta al pueblo con carraclas y matracas para avisar al personal de los servicios religiosos. Las matracas, era realmente difícil tocarlas: una, porque de antemano estaban adjudicadas; otra, debido a su peso y tamaño no todo el mundo podía hacerlo.

El sábado, día de trámite. A por agua bendita a la iglesia y el cura, a recoger los huevos y bendecir las casas de paso. (De esos huevos, salió la lifara que se montaron las mozas y que nosotros acabamos merendándonos). A la noche, las campanas "resucitaban" bandeadas por los mozos ansiosos de que acabara el luto.

Al salir el sol, salía la procesión del encuentro de Jesús con su Madre. Este se reliza siempre en la puerta de la abuela de la Estrella, la tía Lucía. Una vez acabada la misa, todo volvía a la normalidad. Los mozos, al frontón a jugar un partido de pelota y a esperar a la tarde, pues el ayuno y la abstinencia habían tocado a su fin. O al lavadero, que caía al otro lado.

miércoles, 22 de abril de 2009

Pintor, si pintas con amorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr




Hoy, toca darle a la brocha. Bueno más bien al rodillo. Hay que preparar las paredes para recibir nuevos colores primaverales.....

Eso fue ayer, en una room, pero hoy, me ha tocado montar unos muebles comprados en Ikea; porque no me queda más remedio que pasar por el aro sino..............pero vaya paliza de trabajar en mala posición. Menos mal que al estar solo, los tacos no obtenian eco de repetición, lo cual es un alivio. He salido con las piernas y las rodillas machacadas.

Primero, desgüazo una caja y no me salen más que tablas. ¡Ostia! no han comprado tornillos. Movilizo a media familia por teléfono. Destripo otra caja y ¡ahhhhhhh! pero que ...... e inútil que soy. Allí estaban los tornillos y los tacos. Extintor en marcha. El atornillador se encontraba missing. Me vuelvo mono buscándolo. Se me hace la hora de comer, y no había hecho nada de provecho.

Me lio a montar un aparador con cajones para la TV y me lío. Al final monto tres o cuatro aparadores, pero como todo tiene un fin, acabo la tarea que me había propuesto. Mañana, lo termino. Más tarde, ayudado por mi hija la peke, montamos una especie de armario con aparadores o cajones. Menos mal que no me he dejado liar, sino lo hacemos al revés. Pero casi lo acabamos. Ha sido mucho más fácil de montar que el otro trasto.

Como dice mi suegra, el burro que más trabaja, el que pior albarda lleva. Y que razón tiene........ a la vejez se ha dado cuenta. Manda webbs.

domingo, 19 de abril de 2009

caperucita

¿Dónde vas Caperucita
con tu cestito tan lleno?
Voy a casa mi abuelita
a llevarle miel y tortas.
Si quieres niña, los dos iremos
por distintas sendas
a ver cual llega el primero.
El lobo como es tan pillo
de un salto fue a la casita
tragándose de un bocado
a la enfermita abuelita.
Llegó la niña, se la comió
pero por malo, se reventó.



(Esto es una canción que mi madre suele cantar a los niños y ahora,¡cómo no!, a su bisnieta. Tiene un tono lastimero, que a mi no me gusta; como música no se, que cada cual adapte su estilo).

sábado, 18 de abril de 2009

Jueves Santo

Jueves Santo no ayuné
alma mía dónde iré
al corral de las batallas
a comer peras amargas
y membrillos amarillos
y manzanas mal curadas.
Allí está Juan Perrinchín
con las uñas afiladas
pa cortarnos las coradas.

jueves, 16 de abril de 2009

Vaya perlas..













Para darse cuenta que en todos los tiempos ocurren cosas y que las mujeres en grupo son tan peligrosas o más que los hombres, ahí va una historia de la que fueron protagonistas mi madre y cuatro o cinco primas suyas. La edad no la se, tampoco hace falta. Se sospecha por los hechos.

Mi abuelo, las había mandado a recoger cerda al azafrán. La cerda, es la hoja de la planta que al llegar el mes de junio se seca. Esta se recogía a mano sin esfuerzo para arrancarla, el sufrimiento venía de estar arrodillado o en cuclillas para realizar la labor.

Bueno pues la cuadrilla de mocetas, en vez de realizar la faena que hubiera costado dos horas, se dedicaron a hacer terrorismo campero. A un mozo, Santiago, que tenía el aladro -arado- en las cercanías, se lo deshicieron y escondieron las piezas que lo formaban. (Este mozo, un día de san Ginés en que posiblemente todos fueran algo calientes, en unos postes de conducción eléctrica de alta tensión que había a la entrada del pueblo y que allí han permanecido hasta hace pocos años, se apostó a trepar y tocar con un palo los cables. Fue su última y definitiva tontería. Murió electrocutado).

Más adelante, o antes si consideramos el espacio de desplazamiento, había otro mozo, Víctor, cavando para plantar azafrán. A éste lo insultaron todo que quisieron, a distancia claro, por si acaso. "Víctor, culónnnnnnnnnn, socarraaaaaa, cabrónnnnnnnn". Vaya alhajas.

Al final cayó en sus manos un pastor, Cojete. De nombre Raimundo, fue íntimo de mi padre; mangaban fruta y la depositaban en un lugar común del que se abastecían posteriormente. Eran inseparables. Bien, pues a este pobre mozo, le pidieron les diera agua para beber. Bebieron el agua que quisieron y no contentas con ello, el resto se la tiraron al suelo. Solo quien haya estado en el campo en el mes de Junio, o en cualquier época, sabe la importancia de poder contar con agua de boca en cantidad suficiente. Estas "fieras", lo dejaron seco.

Y así, de un día de trabajo que hubiera supuesto a lo sumo hora y media o dos horas de ocupación, lo convirtieron, tras la kale borroka practicada, en una jornada completa pues acabaron a las tres de la tarde. Y yo le pregunto a mi madre: ¿terminaron?. "Huy, si no lo hacemos, el abuelo nos mata".

La primera foto ilustra la faena de coger o recoger la cerda. El resto, diferentes fases del nacimiento, recogida y esbrine de la flor.

miércoles, 15 de abril de 2009

Si......

hay que escribir se escribe, pero con fundamento porque escribir pa ná, es tonteria. Llevo unos días sin darle a la tecla y parece que no siento ningún interés en hacerlo. Me falta chispa para encontrar aventis que contar. Astenia primaveral o la prima Vera que me hace perder el oremus y la inspiración. Así, no llegaremos a ninguna parte.

Y es que le estoy encontrando el buen sabor a esto de estar sin hacer nada. Y nada significa eso, NADA. Hace unos días me encontré con la mujer de mi primo, el del viaje a Santiago, y me preguntó que qué hacía. Nada, el vago. Luego nos vimos los tres y le dijo a él que yo estaba haciendo el vago. Como si el se matara a trabajar.

El aún trabaja a pesar de ser más viejo que yo. El perro se puso a mear en el jardín igual que las viejas. Me llamó la atención y se lo dije. Es que ya es abuelo, me replicó. Y me ha hecho pensar pues yo también soy abuelo. ¿Significará que yo cualquier día haré lo mismo? ¿mear como las abuelas? Harto difícil lo tengo salvo que lleve faldas y lleve el santuario libre y con ventilación asistida.

Porque sacarse la flauta en medio de la calle pa mear en el jardín, a pesar de no tener ningún mérito, está penado y si te pillan los guardias, te rascan el bolsillo e igual te enchironan. Y es que hay que tener cuidado con la justicia. Desde que han perdido el oremus y la vergüenza, igual te sueltan; como al asesino de Mariluz o al que puso tibio al pobre Moreno. Pero por mear o darle un guantazo al nene, que seguro se merecía una jartá de ellos el pequeño hijoputa, te meten a hacer exámen de conciencia una temporada.

Y es que no se puede poner a la zorra a guardar el gallinero. Así pasa lo que pasa. Que los políticos inmorales e indecentes, para sonrojo y escarnio de la ciudadanía, pretender dar lecciones de moralidad mandando a un ministro gilipollas a su casa por ir a cazar venados sin licencia. Sin salir del parlamento, hubiera cumplido con creces su afición. Y sin pegar un tiro.

Años ha, cuando la cárcel de Zuera estaba acabada y vacía, le comenté a un pariente, a la sazón concejal y diputado en la DPT, que yo la llenaba echando leches. Comprendió enseguida mi insinuación. El poblema es que sigo pensando lo mismo.

viernes, 10 de abril de 2009

Las culecas


Solía ocurrir en primavera y eran inconfundibles los síntomas: se paseaban por el corral con las plumas como erizadas, huecas, y sin parar de cloquear: clo,clo,clo. Luego se instalaban en el nidal y no dejaban al resto de gallinas entrar en el para poner huevos. Casi siempre acababan "encerradas" bajo una cesta hasta que se les pasaba la calentura.

Cuando querían aprovechar la condición de la culeca -llueca- para obtener y criar pollos, preparaban una cesta de mimbres llena de paja, le colocaban los huevos que podía cubrir la gallina y al granero a "engorar" los huevos alejada del resto y al abrigo.

Durante los días que duraba la "gestación", debían "embuchar" al ave pues no salía del cesto para nada. Así la alimentaban y mantenían la "fiebre" en el animal. A los 21 días, los polluelos comenzaban a romper las cáscaras de sus correspondientes huevos. Siempre fallaba alguno.

Una vez todos los huevos habían eclosionado, la devolvían al corral, cuidando al principio de que el resto de gallinas no atacaran a los polluelos, aunque la culeca los defendía con fiereza. También había que tener cuidado con las paniquesas y los cuervos pues atacaban -mataban- a los pollitos con fines bien distintos.

De esta forma, se aumentaba o renovaba el corral y la despensa. Mamá gallina-culeca, toda hueca e "hinchada" paseábase por el corral, clo,clo,clo seguida por la pollada. Aparecían la mar de graciosos cuando, echada en el suelo o en su cesta la gallina, los pollos protegidos por ella asomaban sus pequeñas cabezas por entre las plumas de las alas o la cola. Por todas partes, vamos.

Sin duda que resultaba más bucólica, romántica y natural esta forma de gestar pollos que hacerlo con las modernas incubadoras. Aunque sean más eficientes. Productividad, le llaman ahora.

miércoles, 8 de abril de 2009

El milagro

Se hallaba Jesucristo con sus discípulos al pie del monte Tabor.

-Coger una piedra cada uno y en señal de penitencia, subirla a la cima de la montaña.

Judas, cogió una piedra pequeñica y subió muy descansado.

Una vez arriba, el Señor hizo un milagro y convirtió las piedras en bocadillos. Meca, Judas qué putada.

Al otro dia, lo mismo. Pero en esta ocasión, Judas cogió una piedra tan gorda, que casi no llega a la cima.

Pasado el rato, Judas le preguntó a Jesucristo: Señor, ¿y el milagro?. Este le contestó: Hoy, no hay milagro.

A todo esto, san Juan se acerca a Judas y le dice: No me extraña que lo vendas, porque no hace más que jodete.

Pues eso. Hoy, no hay milagro.

martes, 7 de abril de 2009

Viaje a Santiago II

En La Bañeza paramos a cenar. Yo, me derrumbé. Había estado todo el día conduciendo y en cuanto lo dejé, quedé convertido en una marioneta sin ganas para nada. Ni para cenar. Tanto es así, que ni idea de en que consistió la cena.

Reanudada la marcha, cedí el asiento a mi primo. Ya de noche, llegamos a las proximidades del Guadarrama donde no se veia ni jurar a causa de la niebla y la nieve. Las dos cosas a la vez. Creo que nunca he vuelto a ver en la carretera los dos fenómenos simultáneamente. Un camión nos adelantó. No lo pierdas, pégate a el o no llegamos en toda la noche.

La llegada al túnel para atravesar el puerto, sirvió de alivio a la tensión acumulada por la mala situación atmosférica. A la salida, voilá, ni niebla, ni nieve, ni leches. Entrando a Madrid, mi primo casi se traga una rotonda. Sigue recto. Y el jodido obedeció.

Conocía la zona de Tetuán-Cuatro Caminos, del invierno anterior, y allí nos dirijimos. El sereno, nos facilitó un lugar donde dormir esa noche. A la mañana, el ayuntamiento ya nos había avisado para que retiráramos el coche. Pero no como ahora, que solo tienen cazamultas que primero disparan y luego ¡¡usted se calla!!. Y aquí nos la jugó el puto coche. Teníamos unas tres horas para haber visitado el centro de la ciudad -qué menos que la Puerta del Sol y aledaños-.

Se rompió la correa del ventilador y toda la mañana la pasamos en un taller hasta hallar una correa que diera la longitud necesaria. Cuando lo logramos, ya eran las doce; nos ocurrió como a Cenicienta. Así que a buscar la carretera hacia Aragón, la N-II. Pasado Guadalajara, a la derecha y entre una arboleda, había un restaurante de carretera. Era un poco temprano pero la gana ya la teníamos hecha.

Dos fabadas, cordero asado para él y un par de huevos fritos con jamón y tomate para mí. La apoteosis. Y dos botellas de rioja que también sucumbieron. ¡Ala! pa casa. De La Muela (hoy tan en la picota) a Zaragoza, cuesta abajo, ¡¡a 120!!. Y a las 4 y 10' en la consulta del médico. Mi primo se lamentaba después de no habernos quedado en Madrid. Pero ya no había vuelta de hoja. Creo que, como a mí, nunca se le olvidará el viaje. Sobre todo, por las comilonas que se dió. Nos dimos.

Eso sí, el coche se comportó como un jabato, salvo la incidencia de la puta correa.

jueves, 2 de abril de 2009

HdH

Estos son los Relatos que optan al Premio.

Aquí están los 80 relatos (ordenados por fecha de remisión):

1. El monje de Sigena
2. El viaje del Infante
3. La daga
4. Pasión egipcia de un hidalgo toledano
5. La gran pestilencia
6. Naif
7. Lengua de agua
8. La huida
9. Florecilla apócrifa
10. Cantó el gallo en el monasterio
11. La campana de Huesca
12. El Reino perdido
13. El castillo de la colina
14. Nika
15. Y sonaron las campanas
16. La batalla del gran Zab
17. The Aberdeen Bestiary
18. Hilo de plata
19. Un día del segundo Ramiro
20. El viaje
21. La derrota
22. La caxa bermexa
23. Sueños de bronce y sangre
24. El abogado de los inocents
25. La verdad de la Osorio
26. Fantasmas del pasado
27. La sangre de Cutanda
28. La princesa enamorada
29. El privilegio de los más afortunados
30. Arnaud el Hereje
31. La señal de Jacques
32. El viento divino
33. Presencia Mariana
34. Hijos de Abraham
35. Wamba
36. El suicida
37. Ars Magna
38. Dos amigos
39. El rostro
40. Entre las aguas y el cielo
41. Esforzado corazón
42. El final de la batalla
43. Un hombre precavido
44. El manuscrito castellano
45. Deshonra y traición
46. Palestra Decidua
47. El funeral
48. La bruja
49. Ad mortem festinamus
50. La noche previa
51. El abad
52. Un rey, una virgen y la conquista de un reino
53. La perfecta hoguera
54. El topo
55. El heredero
56. La sentencia
57. Las cuitas del abad
58. Torneo en Pamplona
59. Dios, ayuda, et Sant Yagüe
60. Tallado en piedra
61. Historia de un desvelo
62. No puedo
63. La mujer del castillo
64. Recuerdos del primer Omeya de Occidente
65. El reino perdido de Mallorca
66. El mal azul
67. Castigo Divino
68. Sísifo
69. Toda su vida
70. La decisión
71. El fin de las sagas
72. Clara de Asís. Una mujer del S. XIII
73. Los infanzones de Obanos
74. Progrom
75. El encuentro
76. El trono de Inglaterra
77. La loba de Francia
78. La curandera de Córdoba
79. Joan el caballero del Rey
80. El sitio a Carcassonne

Muchas gracias a todos por participar y buena suerte.

miércoles, 1 de abril de 2009

Solo tú alumbras mi camino

Eres estrella que no dejas de brillar
El lucero que alumbra mis senderos
Tú la más bella que mis ojos mirarán
La que quiero compañera de mis sueños

Tú eres estrella que no cambia de lugar
Aquel lucero que está arriba cuando miro
Tú de mi vida sé que eres la otra mitad
Y en la eternidad, tu amor será conmigo

Eres estrella, eres lucero
Eres el ángel de mis sueños
Eres mi estrella mi lucero
La luz que alumbra mis senderos

Eres estrella que en mis noches brillará
Aquel lucero que guía mi camino
La mujer sin la cual no puedo estar
Mi vida sin tí carece de sentido

Eres, mujer, el ángel de mi vida
Eres mi estrella
Un pedacito de tu cielo lo que quiero
Mi lucero

Eres mi estrella y mi lucero
Mi niña bella, a quien más quiero
Ay, por tus besos, yo me muero