Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.
martes, 30 de junio de 2009
Raquél vs Zahra
Andaba yo dubitativo elucubrando un nombre de heroína (ojo, caballo no, ¿ein?), que a modo de Dulcinea me sirviera para mi particular deambular onírico. Vínome a la mente Jacob, pues recordé, a propósito de la última película vísta en la tele sobre su hijo José y la llegada de los israelitas -¿ya serían judíos?- a Egipto, que ya anciano, lloraba a la que había sido su amor de toda la vida, Raquél, muerta a consecuencia del parto de su hijo Benjamín.
En tiempos de aquél santo varón, a los escolares nos enseñaban Historia Sagrada como una asignatura más. Blanda y divertida, pero Historia al fin y al cabo. A mí, no me ha creado jamás ningún trauma el saber los hijos de Jacob, que aún recuerdo sin recurrir al google, las penalidades de Abraham cuando su dios le pidió en sacrificio a Isaac, o las de Noé para meter en la patera a una pareja de bichos de cada especie.
Sin contar las aventuras de Sansón y la putada que le gastó su mujer Dalila o la pedrada endiñada por David al gigante Goliath, que se comía crudos a los niños israelitas. Tampoco se me olvida que a san Juan le cortaron el cuello en la prisión de Maqueronte, por criticar las otras putadas que realizaban la querida del rey Herodes Antipas y su hija delante de toda la corte. (Por cierto que en mi pueblo, al habitáculo donde se criaban los cerdos, guarros, gorrinos, etc. en otros tiempos, le llamamos "la corte". El pueblo es sabio).
Ah sí, que me había perdido. Pues resulta que al pobre Jacob, Raquél, lo considera un desalmado que despojó a su hermano de la primogenitura por un plato de lentejas, olvidando que, en todo caso, fué una transacción comercial. A más a más, si dios ya tenía escrito el futuro, ¿qué culpa pudo tener el hombre?.
Que era un políglota. Joer ¿y a quién no le gustaría serlo?. Dos o tres esposas, más alguna esclava. ¿Qué podía hacer ante el presunto dolor de cabeza de sus amantes esposas?. Aliviarse como pudo. Claro, como no ponían medios ni existía la píldora postcoital, ¡ala!, doce churumbeles. Sin olvidar al cabroncete de su tío, que le dió gato por liebre.
Pues sí. A mi Jacob siempre me ha caído bien. Pero habré de buscar otro nombre con menos connotaciones "negativas". Aunque también está unido a otro políglota, Abderramán III, la leyenda que pervive sobre la ciudad de Medina Azahara, me impulsa a cambiar el nombre de Raquél por el de Azahara o Zahra. Y es que soy un romántico. Un pobre diablo sentimental.
lunes, 29 de junio de 2009
Rioja
Logroño
Colegio en el parque. Logroño
Berceo
Fachada principal del monasterio de san Millán (creo le llaman de Yuso y Suso)
Patio interno del monasterio. A la derecha, hospedería. No se ve, intencionadamente.
De Logroño, como decía, poco puedo contar pues, o no dí con cosas dignas de recuerdo, o estuve más perdido que un pato en un garage. Aun así, tuve tiempo de visitar, supuestamente, algo del centro de la city y comprar unas apuestas para el sorteo del Euromillones. Ni un puto número acerté y me gaste 10€.
Camino de santo Domingo ví el panel que anunciaba la distancia que había a san Millán de la Cogolla y Berceo. A partir de ese momento, estuve muy atento calculando los kms. que me quedaban para llegar a ese desvío. Cuando lo ví, y procurando no perderme, lo tomé y seguí. Distaba mucho de llegar al monasterio. El día estaba nublado y casi con niebla. Las montañas no se divisaron en ningún momento aunque no llegó a llover.
En el monasterio, como ya era hora de comer, no había nada abierto así que me limité a tomar unas fotos, ehar un vistazo a aquellas viejas piedras llenas de historia y volver grupas. No cabe duda de que aquello está orientado al turismo de pago, estudiosos de los libros que allí se guardan. Tanto el parador como los demás establecimientos, no están esperando a los romeros.
Por diferente sitio que a la venida, tomé rumbo a santo Domingo. En el trayecto, solo una cosa me llamó la atención: grandes fincas de patatares en flor como nunca había visto. Sin duda el terreno debe de poseer cualidades para ello. A quienes somos hijos de la tierra, estas cosas nos emocionan. Por fin dí vista a la llanura que alberga a santo Domingo y una cosa me llamó poderosamente la atención: La altura de la torre de la catedral sobresaliendo majestuosa sobre el resto de la población.
Colegio en el parque. Logroño
Berceo
Fachada principal del monasterio de san Millán (creo le llaman de Yuso y Suso)
Patio interno del monasterio. A la derecha, hospedería. No se ve, intencionadamente.
De Logroño, como decía, poco puedo contar pues, o no dí con cosas dignas de recuerdo, o estuve más perdido que un pato en un garage. Aun así, tuve tiempo de visitar, supuestamente, algo del centro de la city y comprar unas apuestas para el sorteo del Euromillones. Ni un puto número acerté y me gaste 10€.
Camino de santo Domingo ví el panel que anunciaba la distancia que había a san Millán de la Cogolla y Berceo. A partir de ese momento, estuve muy atento calculando los kms. que me quedaban para llegar a ese desvío. Cuando lo ví, y procurando no perderme, lo tomé y seguí. Distaba mucho de llegar al monasterio. El día estaba nublado y casi con niebla. Las montañas no se divisaron en ningún momento aunque no llegó a llover.
En el monasterio, como ya era hora de comer, no había nada abierto así que me limité a tomar unas fotos, ehar un vistazo a aquellas viejas piedras llenas de historia y volver grupas. No cabe duda de que aquello está orientado al turismo de pago, estudiosos de los libros que allí se guardan. Tanto el parador como los demás establecimientos, no están esperando a los romeros.
Por diferente sitio que a la venida, tomé rumbo a santo Domingo. En el trayecto, solo una cosa me llamó la atención: grandes fincas de patatares en flor como nunca había visto. Sin duda el terreno debe de poseer cualidades para ello. A quienes somos hijos de la tierra, estas cosas nos emocionan. Por fin dí vista a la llanura que alberga a santo Domingo y una cosa me llamó poderosamente la atención: La altura de la torre de la catedral sobresaliendo majestuosa sobre el resto de la población.
domingo, 28 de junio de 2009
Camino al Cielo
Pórtico de una iglesia en Puentelareina
Albergue de peregrinos
Señal del Camino
Mi primer contacto visual con el Camino
Llevaba un tiempo deseando iniciar un periplo por el Camino de Santiago. No obstante, mi particular forma física me impide hacerlo con el methode traditionel, en el tren de san Fernando o a pedal. He podido comprobar que ambas formas de peregrinar son durísimas y requieren unas formas física y mental de las que disto mucho de poseer, así como una voluntad o una fe inquebrantables.
Por ello, elegí la única forma que puede permitirme al menos visitar los lugares, no todos, por los que discurre. Tomé contacto con el, antes de llegar a Puente la Reina, en Navarra. Los signos visuales así lo indican. En esta localidad, visité los monumentos e iglesias que destacan a simple vista por su antiguedad. Lóbregas y oscuras en su interior, apenas se distingue el contenido de las mismas.
Una vez tomé la dirección hacia Logroño, el lío padre con las señales de tráfico. Marchas atrás, seguir a los romeros, etc. Y no fuí el único que tuvo esos titubeos. Por una carretera sin tráfico, lo cual me mosqueaba, los pobres ciclistas iban echando los belfos. De ahí obtuve la certeza de que yo, ni en bici, sería capaz de hacer una sola etapa del Camino. Al fin, me introduje en la autovía, única forma coherente de llegar a algún sitio sin ver ninguno.
En Logroño más de lo mismo. Te encuentras cautivo al no conocer la ciudad ni el emplazamiento de lo más importante. Estuve alrededor de una hora visitando el centro. Poca fe puedo dar de la misma. Mi meta era Santo Domingo de la Calzada, dirección Burgos.
Albergue de peregrinos
Señal del Camino
Mi primer contacto visual con el Camino
Llevaba un tiempo deseando iniciar un periplo por el Camino de Santiago. No obstante, mi particular forma física me impide hacerlo con el methode traditionel, en el tren de san Fernando o a pedal. He podido comprobar que ambas formas de peregrinar son durísimas y requieren unas formas física y mental de las que disto mucho de poseer, así como una voluntad o una fe inquebrantables.
Por ello, elegí la única forma que puede permitirme al menos visitar los lugares, no todos, por los que discurre. Tomé contacto con el, antes de llegar a Puente la Reina, en Navarra. Los signos visuales así lo indican. En esta localidad, visité los monumentos e iglesias que destacan a simple vista por su antiguedad. Lóbregas y oscuras en su interior, apenas se distingue el contenido de las mismas.
Una vez tomé la dirección hacia Logroño, el lío padre con las señales de tráfico. Marchas atrás, seguir a los romeros, etc. Y no fuí el único que tuvo esos titubeos. Por una carretera sin tráfico, lo cual me mosqueaba, los pobres ciclistas iban echando los belfos. De ahí obtuve la certeza de que yo, ni en bici, sería capaz de hacer una sola etapa del Camino. Al fin, me introduje en la autovía, única forma coherente de llegar a algún sitio sin ver ninguno.
En Logroño más de lo mismo. Te encuentras cautivo al no conocer la ciudad ni el emplazamiento de lo más importante. Estuve alrededor de una hora visitando el centro. Poca fe puedo dar de la misma. Mi meta era Santo Domingo de la Calzada, dirección Burgos.
viernes, 26 de junio de 2009
Yo, puta (con perdón)
Hubo una vez una mozuela, con la cual tuve amistad, que era pelín casquivana. Fué en la época de mis afecciones culinarias. La noia, era compi de curro, lo cual propiciaba que estuviéramos juntos varias horas; pero no revueltos. Según me enteré, el año anterior habría tenido un affaire con otro mozuelo de mi nazionalidad y a mí, la muy puñetera, me tomó de conejillo de indias. O sea, de pagano de los estropicios del anterior y ya se sabe, no hay oso que se resista a la miel, a pesar de los picotazos.
Era pelirroja, pequeña y muy salada. Y como yo era un pardillo en esas lides, la verdad es que aprendí mucho. Sobre todo, que si una mujer te quiere "joder", lo hace a conciencia aunque acabes lavando a mano. También era muy aplicado, todo hay que decirlo, en esto último. Púsome al día de las cosas más elementales aún no aprendidas ni practicadas. No pasamos de ahí ¡ojo!, no por falta de interés, una vez comenzado el curso.
Y tenía una manía o manera de tomarme el pelo muy peculiar. Estaba empeñada en meterse a puta (con perdón) en los bares de alterne de Sarriá, en su ciudad, Barna. Jugaba conmigo al gato y al ratón, quedando claro quien era, en este caso, el mouse.
Una vez acabada la temporada de trabajo, volvió a su casa en Les Esplugues, donde una vez la visité. Allí, me persuadió de que aquello no tenía futuro y que tal día un año. Y estando en el bar que había al lado de su casa, encontré a un joven en la barra que entabló conversación conmigo. El chaval, llevaba en la cintura un cuchillo cocinero de la ostia. No sé cómo, pero le convencí de tal manera de la peligrosidad e inconveniencia del "pelapatatas", que allí mismo lo partió sobre su rodilla y lo arrojó a la basura. Fiuuuuuuuuuuuuu.
Y tengo una anécdota curiosa, fruto de esta etapa. Había un "chisme" en la barra del bar donde "veranee" que pinchabas y salían regalos. Previo pago, claro. Me empeñé y conseguí llevarme un reloj de pulsera con la pretensión de regalárselo más adelante a la noia. Mi madre que lo vió, lo quiso para ella. ¡¡NO!!. Más tarde, en la pensión de Las Ramblas donde me alojaba, me lo birló un fulano. A lo que me dí cuenta, ambos habían volado. Justo castigo a mi negativa, supongo.
enviado lunes, 25 de septiembre de 2006 16:37 por WARRIORV
miércoles, 24 de junio de 2009
Los Mayos
Fué costumbre, hasta los años 60, que el día 30 de Abril por la noche los mozos se reunieran para sortear las mayas. Se hacían dos lotes: en uno las mozas, en el otro los mozos. Así se emparejaban. Se sacaba una maya y su correspondiente mayo. No se hacían excepciones. Novias y novios ocupaban su lugar en la gorra correspondiente. Los había con suerte pues les tocaba de maya a su novia o aquella chica de su preferencia.
Después, casa por casa, a las mozas se les cantaban los mayos y , también cantando, se le comunicaba a cada una el mayo que en suerte le había tocado. Los deberes del mayo para con su maya eran, acompañarla al baile y bailar la primera pieza de música que sonaba. Invitarla a un vermú u otra consumición. Después, cada uno seguía su habitual desarrollo festivo. Al final del mes de Mayo, todos se juntaban en una merienda.
En mi caso, solo tuve una maya. Cuando mis mayas naturales tuvieron edad, yo ya no estaba y la costumbre se había perdido por falta de participantes. Mi juventud, unida a que ella era mayor y tenía novio, quizá fueron obstáculo a la hora de cumplir adecuadamente con mis deberes de mayo.
Desde aquí mi recuerdo y homenaje a mi primera y única maya, Feli. Hace años que nos dejó.
Estamos a 30 del Abril cumplido
alegraos damas que Mayo ha venido.
Ya ha venido Mayo, bienvenido sea
florido y hermoso con la primavera.
Si quieres saber salada
el mayo que te ha caido
(nombre) se llama por nombre
y (apellido) por apellido
De Los Mayos de Peracense
enviado jueves, 28 de septiembre de 2006 17:53 por WARRIORV
martes, 23 de junio de 2009
Añoranzas
Esta mañana paseando, me he vuelto a colocar bajo la vía del tren en el oxidado puente, junto al río. Mi mente retrocedió; lo escuché pasar a toda pastilla o detenerse en el cercano apeadero. ¡Cuánto miedo pasábamos y qué atracción para la chiquillería….!
Me suenan en la memoria el automotor, el mixto, el interminable mercancias…… Todos, historia de un pasado irrepetible, recuerdo imborrable.
Hoy, tus railes, están cubiertos por la maleza o dando paso a vías verdes. No nos llevarás más al cine a Daroca ni a las fiestas de los pueblos vecinos. Te murieron hace tiempo.
jueves, 18 de junio de 2009
Objetivo Birmania
martes, 16 de junio de 2009
Todo llega
Llevaba mucho tiempo planeando hacer el Camino de Santiago. El tiempo, en estos primeros días de la semana, no se augura estable. Al final de la misma, vuelve el verano que estos últimos días hemos venido padeciendo por lo elevado de las temperaturas. Será una aventura, de eso no hay duda. Lamento profundamente que mi situación no me permita hacer el Camino a pie y acompañado. Si todo va bien, espero hacer otra parte, o el resto, en el próximo mes de Septiembre.
A la vuelta nos vemos blog.
lunes, 15 de junio de 2009
ZAFRAN-AZAFRAN
Crocus sativus
Mi pueblo, siempre ha sido productor de zafrán. Su nivel de producción siempre ha ido ligado al clima -lluvias de primavera y verano- y a la mano de obra, imprescindible, para sacarla adelante. En la actualidad, ha decaído mucho respecto de los años 50-60. Entonces, en algunas casas, se contrataban esbrinadoras de los pueblos que no tenían cultivos. Por encima de los 1.200 metros de altitud. Incluso llevaban la rosa a esbrinar a esos pueblos. Hoy, ha disminuido tanto el cultivo, que ha pasado a ser testimonial. Aunque quienes viven allí todo el año, siguen plantando todas las primaveras la cebolla o bulbo, allá por san Pedro.
Dependiendo de las lluvias habidas en el verano -la planta está inactiva de Junio a Octubre- tarda más o menos en "retoñar". Suele ser en la primera quincena de Octubre. Una campana de Gauss, representaría a la perfección la producción diaria. (In crescendo para acabar en nada (y hartos)). Y todos los días hay que recoger la rosa nacida durante la noche, en el campo. Más o menos un mes.
En aquel tiempo, íbamos andando de madrugada a recolectar la rosa (flores). Llegada de noche al campo. A esperar a que amanezca. Si hacía frío, a quemar aliagas para calentar las manos. Recuerdo al tío Jesús diciendo a su hijo Eliseo: "cara la luz del día, cara la luz del día", para poder ver las rosas en la oscuridad.
Luego, con el frío, a currucar. La mano se quedaba aterida y además del dolor del entumecimiento, no se podían coger las flores. De una en una. A primera hora era cuando más cundía pues la flor estaba "acapullada" antes de que le diera el sol. Luego se abría y era más difícil cogerla. A lo largo de la mañana, los dolores de riñones eran normales. Cuando finalizaba la recolección del día -en los días de máxima eclosión no se lograba- con la carga a cuestas, a casa. Igual eran las 12 o la 1 del mediodía.
Si tenías suerte y había quien las hubiera cocinado, un plato de patatas zafraneras era el mayor manjar habido para un cuerpo dolorido, cansado y hambriento. Doy fe de ello.
Más tarde comenzaba el esbrine. Había que separar el brin -los estigmas de la flor- de las hojas inservibles. (Cuando había poca rosa, también separámos las lengüetas, lo amarillo de la flor. Venta y beneficio directo para cada uno). De una en una, y las había por miles.
Era este un acto más social que la recolección. La gente se juntaba al sol o a cubierto dependiendo del día. Se echaba la rosa sobre la mesa (que solía ser para ese menester exclusivamente) y ¡hala! a rebajar el montón. Hasta que la luz solar lo permitía. Se comía sobre la marcha. Un tomate de la tierra -insuperable- unos "civiles" o un trozo de magra. Y a darle a la pelada sin parar. La gente hacía un "repaso general" del tema que salía a colación. Algo así como como las tertulias de TV de hoy, pero en decente. Cuando había esbrinadoras, aún lo conocí, al dar de mano por la tarde las mozas y los mozos se juntaban media hora para bailar.
Después de cenar, con luz eléctrica, a seguir hasta bien entrada la noche. Dependía del retén que hubiera de rosa sin esbrinar. Y raro era quien no daba alguna cabezada, que a veces casi era siesta, esbrinando. Por eso, el palique, era imprescindible.
Una noche, me dolía la cabeza. Me permitieron que me fuera a la cama y me puse el termómetro para ver si tenía fiebre. El aparato, tuvo tiempo toda la noche para comprobar mi temperatura. A la mañana, cuando me despertaron para ir a coger rosa, el termómetro feneció.
Mis padres se juntaban con los vecinos; recuerdo una conversación que llevaban entre ellos y que me atañía. No imaginaban cuanto, con el tiempo; yo tampoco. Pero yo, por aquel entonces, no discernía entre tantas flores. Presumo que, en aquella época, el único capullo, era yo. Pero esa, ya es otra historia.
enviado viernes, 22 de septiembre de 2006 21:50 por WARRIORV
viernes, 12 de junio de 2009
¿Un Stradivarius?
Cuando mi señor padre era joven, dieron con sus huesos en el pueblo unos comediantes u "hongaros", que también así les llamaban. Y fué como un amor a primera vista, tan repentino como exigente, el que surgió en él al contemplar un violín que estos portaban para su espectáculo.
Quizá fuera el primero que contemplaba en su vida (nunca se lo he preguntado) pero consiguió que mis abuelos (Manuel y Maximina) se lo compraran -y que los faranduleros se lo vendieran quizá por comida y algo de dinero, que tampoco sería mucho de ambas cosas pues no estaban los tiempos como para alegrías y eran muchos en casa.
Sea como fuere, sin ayuda de ninguna clase, el hombre aprendió a tocarlo, a hacer música con el. Yo, aunque alguna vez lo intenté, no pasé de tocar el violín. A lo más que llegué fué a acompañar con la guitarra al tío José o a Jorge, que tocaban la bandurria, para que bailaran mis amigos.
¡Y no vean los bailes que preparaban! Había tocadores de guitarra, bandurrias, laúd y el violín. Eran requeridos en las bodas de los pueblos cercanos y en las del propio, por supuesto. Tocaban de todo. Valses, tangos, mazurkas, pasodobles.....(como vienen a mi mente aquellas canciones); nada que ver con lo de ahora. Aunque a mi me encanta un solo de John Dummer llamado NINE by NINE. Y había sobre todo, muchos mozos y mozas, parejas, lo necesario para danzar.
Recuerdo una canción que él tocaba para mí cuando yo tenía 4 años. En mi memoria permanece letra y música: "Vuela, vuela palomita, vuela, vuela al palomar, no te vayas tan solita, palomita......" Y la Palomica, voló de mi palomar pero sigo teniéndola en mi alma y cerca. Pero esa, ya es otra historia. (He buscado en el eMule, pero no la encuentro. La canción.)
Por cierto que, el violín, lleva dentro un papel que pone "copy of Stradivarius"; mira que si fuera original y nosotros sin saberlo.......
enviado viernes, 15 de septiembre de 2006 17:46 por WARRIORV
jueves, 11 de junio de 2009
La de la mochila azul
Cuando era un mocoso, estaba loca e íntimamente enamorado de una niña de mi edad. Y aunque todo el mundo lo sabía, ella incluida, jamás de mi boca salió palabra en ese sentido ante ella. Como no podía ser menos, era la más bella de la clase, faltaría plus. Así transcurrieron esos años en los cuales se está en el limbo, pues aún no se tienen mas que sentimientos puros.
Y ocurrió, entrando ya la pubertad, que una noche por san Juan, cuando se ponían las enramadas, me encontraba con dos colegas y primos a la vez, vagabundeando por el pueblo. Estos traidores, conocedores de mi debilidad, me arrastraron a ser cómplice de un tremendo sacrilegio: arrancar unos cardos enormes, floridos, y ponerlos en la puerta de su casa. Como estaba en minoría y era cobarde, participé.
Cuando decidimos irnos a la cama, esperé un tiempo y regresé al lugar del "crimen". Cogí los cardos y los arrojé a la rambla de donde los habíamos arrancado y en su lugar coloqué algunas frutas que había tomado prestadas de algún huerto. Ya feliz y con la conciencia tranquila, entonces sí, me fuí a la cama.
Pero la historia no acabó ahí. El más pariente de los primos me contó hace poco, mejor dicho me confesó, lo buenos que estaban los albaricoques que le había puesto a la niña (a la sazón, ya no tan niña) a cambio de los cardos. Los muy taimados, sospechando que yo volvería a quitarle los "floreros", tampoco se fueron a dormir. No encontraron los cardos, pero se comieron la fruta.
¿Cómo iba a saber él lo que ocurrió, después de tantos años? ¡¡Porque lo hicieron!!. Con amigos como estos, no hacen falta enemigos.
enviado miércoles, 13 de septiembre de 2006 17:53 por WARRIORV
martes, 9 de junio de 2009
In memoriam
A principios de mes nos dejaste. Has sido el primero de los quintos que abandona este mundo en contra de su voluntad. Y si bien es verdad que nuestras vidas han discurrido separadas, no lo han sido tanto como para hacer olvidar y desaparecer los años de escuela pasados en común junto al resto de los amigos y compañeros de correrías.
Especial recuerdo me merece, por las consecuencias posteriores, el dia aquel en el que, requisando agua por todos los pozos de los huertos para regar los árboles, tu te metiste en el de Juanito y encostraste sandias. Como no podía ser menos, entramos y cogimos varias. No valían, eran pequeñas e inmaduras, como nosotros. Pero la que se armó. ¿Recuerdas?. Vino la tía Mariacruz a la escuela hecha una furia y gritando como una gallina culeca, que le habíamos quitado las sandías y destrozado el huerto. ¡¡Qué diferencia de tiempos!! In illo témpore, cualquiera se sentía con derecho a corrernos por cualquier motivo. No negaré que quizá en algún asunto tuvieran razón. Pero las hostias que nos atizaba el inefable maestro (hoy pienso: ¿no le daba vergüenza un zángano como el, pegar y de esa forma a unos niños indefensos?) no eran de recibo pero se sentían con derecho, los unos para condenarlas, el otro, como verdugo para ejecutarlas. (Recuerdo una vez en que tu te rilaste piernas abajo y una hermana tuya hubo de venir a limpiar el suelo de la clase. ¡¡Qué inmenso honor para el maestro!!).
Tampoco olvido la conversación que tu y yo mantuvimos sobre una chica y que luego le transmitiste. ¡So mari......! ¿buscabas enemistarla conmigo? pues lo conseguiste. Ella me contó lo que tu quisiste decirle, y en definitiva nos quedamos los dos al pairo. ¡¡Y no te lo perdono!!
Habría tantas cosas.................Poco a poco irían saliendo más. Como cuando haciendo hoyos para los árboles nuestro ínclito Aliseo te abrió la cabeza con la azada...(fué a verte y te echó el gato a la cara)....... por cierto ¿qué piensas sobre la gran estafa que supuso el "coto escolar"? Nos hicieron trabajar como burros -los dolores de piernas que yo hube de sufrir en aquel tiempo- para luego no recibir nada a cambio....
En fin, dicen que los muertos viven en la memoria de los vivos. Por ello tú, Joaquín, mientras nosotros vivamos, tu vivirás con nosotros. Descansa en paz, amigo.
enviado martes, 29 de agosto de 2006 9:10 por WARRIORV
Especial recuerdo me merece, por las consecuencias posteriores, el dia aquel en el que, requisando agua por todos los pozos de los huertos para regar los árboles, tu te metiste en el de Juanito y encostraste sandias. Como no podía ser menos, entramos y cogimos varias. No valían, eran pequeñas e inmaduras, como nosotros. Pero la que se armó. ¿Recuerdas?. Vino la tía Mariacruz a la escuela hecha una furia y gritando como una gallina culeca, que le habíamos quitado las sandías y destrozado el huerto. ¡¡Qué diferencia de tiempos!! In illo témpore, cualquiera se sentía con derecho a corrernos por cualquier motivo. No negaré que quizá en algún asunto tuvieran razón. Pero las hostias que nos atizaba el inefable maestro (hoy pienso: ¿no le daba vergüenza un zángano como el, pegar y de esa forma a unos niños indefensos?) no eran de recibo pero se sentían con derecho, los unos para condenarlas, el otro, como verdugo para ejecutarlas. (Recuerdo una vez en que tu te rilaste piernas abajo y una hermana tuya hubo de venir a limpiar el suelo de la clase. ¡¡Qué inmenso honor para el maestro!!).
Tampoco olvido la conversación que tu y yo mantuvimos sobre una chica y que luego le transmitiste. ¡So mari......! ¿buscabas enemistarla conmigo? pues lo conseguiste. Ella me contó lo que tu quisiste decirle, y en definitiva nos quedamos los dos al pairo. ¡¡Y no te lo perdono!!
Habría tantas cosas.................Poco a poco irían saliendo más. Como cuando haciendo hoyos para los árboles nuestro ínclito Aliseo te abrió la cabeza con la azada...(fué a verte y te echó el gato a la cara)....... por cierto ¿qué piensas sobre la gran estafa que supuso el "coto escolar"? Nos hicieron trabajar como burros -los dolores de piernas que yo hube de sufrir en aquel tiempo- para luego no recibir nada a cambio....
En fin, dicen que los muertos viven en la memoria de los vivos. Por ello tú, Joaquín, mientras nosotros vivamos, tu vivirás con nosotros. Descansa en paz, amigo.
enviado martes, 29 de agosto de 2006 9:10 por WARRIORV
lunes, 8 de junio de 2009
Delirios (pero no de grandeza)
Esta pasada noche, he dormido fatal. Y si conseguía dormir, soñaba las cosas más estrafalarias.
He tenido un sueño del cual me acuerdo perfectamente. Estábamos prisioneros, aunque yo no me sentía asi, parecía como si acompañara a alguien o tuviera doble personalidad. De los alemanes (manda webss). El caso es que han hecho, los prisioneros, un gran estropicio y han huido. Yo seguía como prisionero-espectador. Tumbado en una habitación enfrente de donde ellos, los alemanes, estaban descubriendo la huida; no me explico como no me han visto pues yo a ellos los estaba viendo perfectamente.
A continuación, han emprendido la persecución por donde suponían se había producido la fuga. El último carcelero, se volvía en busca de su perro, y yo, casi a su lado. Velozmente, por el edificio hemos huido en dirección contraria. Siempre dos, sin saber quién era el otro al que no veía.
Corriendo, hemos llegado a las Cuestas -eso es el pueblo- sin que nos persiguiera nadie. Al iniciar el ascenso, ya llevávamos un trecho, gentes abajo con perros -argentinos- parece ser pretendían darnos alcance. Entonces hacia nosotros ha venido ¡el perro del carcelero! pero no a perseguirnos pues se habían hecho amigos. Yo le he tirado una piedra pretendiendo ahuyentarlo y le he dado en la cabeza.
La cosa ha acabado llegando a otro país ¿el Nepal? donde ya éramos libres y nos daban asilo. ¡¡Mando carallo las tonterías que se sueñan!!
domingo, 7 de junio de 2009
La rana Gustavo
Este rosal lleva esperando muchos años
Los ajos, Camino de madurar
Platero, sesteando
Amanece en san Ginés. Son las 6.30 de la mañana
Bethoven, me mira pacíficamente
En estos días de estancia en el pueblo, me he convertido en un reportero muy dicharachero. No tanto como la rana Gustavo pero casi. Cámara en ristre, a todo lo que se menea le tiro una foto.
No puedo poner aquí todas las fotos, pero sí alguna especial. En el mes de febrero planté los ajos para mis padres. Hice las fotos correspondientes aunque no sé andeandarán. Pero ahora expongo a los ajos en su plenitud dispuestos para su recolección a finales de mes. Por san Pedro. Fuí con el tío y los regamos con el motor vaciando el pozo. Ahora es cuando engordan y no les puede faltar agua. El cielo se muestra remiso a regarlos y hay que ayudarles. La cosecha de cereal iba muy bien, pero la sequía podría dar al traste con ella.
Una mañana temprano me levanté al salir el sol y me fuí a sulfatar zarzas. Las fincas se han quedado yermas y estos arbustos se están adueñando de ellas. También hube de vérmelas con unos grifos reticentes a dejar de gotear. Aquí la cosa se me complicó. La llave de entrada del agua se jodió, el manguito también y al final mandé a cascala los grifos y monté un monomando. No sé como no se me escurrió antes. Ahora es una gozada.
Los rosales, otra gozada. Qué hermosura de flores. Y me fuí a fotografiar a Platero, al cual lo había visto al pasar por el Camino. No se inmutó aunque no se puede uno fiar; igual te suelta un par de coces y te pilla los eggs. Fue sorpresa encontrarme allí a Bethoven.(Yo genéricamente, a los de esta raza, les llamo a todos así). Alguien le hizo una foto en Ródenas y la mandó a un concurso en la capital. Y lo ganó. 100.000 pelas. Pero a el, no le llegó ni un hueso.
Y cuando íbamos mi padre y yo a regar los ajos, una buitrada incesante planeando sobre nosotros aterrizaba un poco más lejos; 200 metros escasos. Él se maravilló al verlos planear uno tras otro. Nunca había visto una cosa igual. Al dueño del perro le pregunté si habían tirado algo y me confirmó la muerte de una oveja a la cual habían arrojado allí donde los buitres se posaban. Estos animales, parece mentira se enteren a cientos de kilométros de la existencia de carroña.
Esta vez, he tenido suerte. El cabrón de "lindo pulgoso", no se ha meado en las ruedas del coche.
Los ajos, Camino de madurar
Platero, sesteando
Amanece en san Ginés. Son las 6.30 de la mañana
Bethoven, me mira pacíficamente
En estos días de estancia en el pueblo, me he convertido en un reportero muy dicharachero. No tanto como la rana Gustavo pero casi. Cámara en ristre, a todo lo que se menea le tiro una foto.
No puedo poner aquí todas las fotos, pero sí alguna especial. En el mes de febrero planté los ajos para mis padres. Hice las fotos correspondientes aunque no sé andeandarán. Pero ahora expongo a los ajos en su plenitud dispuestos para su recolección a finales de mes. Por san Pedro. Fuí con el tío y los regamos con el motor vaciando el pozo. Ahora es cuando engordan y no les puede faltar agua. El cielo se muestra remiso a regarlos y hay que ayudarles. La cosecha de cereal iba muy bien, pero la sequía podría dar al traste con ella.
Una mañana temprano me levanté al salir el sol y me fuí a sulfatar zarzas. Las fincas se han quedado yermas y estos arbustos se están adueñando de ellas. También hube de vérmelas con unos grifos reticentes a dejar de gotear. Aquí la cosa se me complicó. La llave de entrada del agua se jodió, el manguito también y al final mandé a cascala los grifos y monté un monomando. No sé como no se me escurrió antes. Ahora es una gozada.
Los rosales, otra gozada. Qué hermosura de flores. Y me fuí a fotografiar a Platero, al cual lo había visto al pasar por el Camino. No se inmutó aunque no se puede uno fiar; igual te suelta un par de coces y te pilla los eggs. Fue sorpresa encontrarme allí a Bethoven.(Yo genéricamente, a los de esta raza, les llamo a todos así). Alguien le hizo una foto en Ródenas y la mandó a un concurso en la capital. Y lo ganó. 100.000 pelas. Pero a el, no le llegó ni un hueso.
Y cuando íbamos mi padre y yo a regar los ajos, una buitrada incesante planeando sobre nosotros aterrizaba un poco más lejos; 200 metros escasos. Él se maravilló al verlos planear uno tras otro. Nunca había visto una cosa igual. Al dueño del perro le pregunté si habían tirado algo y me confirmó la muerte de una oveja a la cual habían arrojado allí donde los buitres se posaban. Estos animales, parece mentira se enteren a cientos de kilométros de la existencia de carroña.
Esta vez, he tenido suerte. El cabrón de "lindo pulgoso", no se ha meado en las ruedas del coche.
sábado, 6 de junio de 2009
Y SEREMOS.......
LA ESCORIA QUE AUN PUEDE QUEMAR
LOS POLOS DE UN IMÁN
LA LLUVIA Y LA TIERRA
LAS OLAS DEL MAR.
SI UN DIA TE DICEN
QUE ME HAN VISTO LLORAR
SEGURO ES POR TI
NO HAS DE PREGUNTAR.
LE TENGO ENCARGADO
YA SABRÁS A QUIEN,
QUE CUANDO ME VAYA
DEBERÁS SABER
QUE TÚ FUISTE SIEMPRE
MI AMOR Y MI HIEL.
enviado miércoles, 10 de octubre de 2007 0:20 por WARRIORV
LOS POLOS DE UN IMÁN
LA LLUVIA Y LA TIERRA
LAS OLAS DEL MAR.
SI UN DIA TE DICEN
QUE ME HAN VISTO LLORAR
SEGURO ES POR TI
NO HAS DE PREGUNTAR.
LE TENGO ENCARGADO
YA SABRÁS A QUIEN,
QUE CUANDO ME VAYA
DEBERÁS SABER
QUE TÚ FUISTE SIEMPRE
MI AMOR Y MI HIEL.
enviado miércoles, 10 de octubre de 2007 0:20 por WARRIORV
El reloj de oro (ó de-funcionarios)
Leo, en la prensa, con comentarios a favor o en contra dependiendo de quien los emite, que a los funcionarios -no se si autonómicos, estatales o ambos dos-, les van a dar días de fiesta añadidos dependiendo de la antigüedad (en años) acumulada en el puesto (o la gabela). Habida cuenta de que los suman por trienios, alguno estará ya frotándose las manos.
Y mira tú por donde, en la empresa privada ocurre todo lo contrario. No es que los empresarios o sus sicarios vayan locos por lograrlo, es que han conseguido eliminar la generación de antigüedad. En la empresa donde trabajo, a partir del 1º de Enero del año que viene no se generará más antigüedad por nadie. Quedará congelada. Ni que decir tiene que hace tiempo que los nuevos contratados han perdido ese derecho.
Pero no solo ha sido eso. Hace años que los espléndidos "aguilandos" con que éramos obsequiados para Navidad, pasaron a mejor vida. Tres botellas de vino de la tierra por cabeza, desequilibraban los resultados de la empresa según la dirección.
Pero el paradigma de la racanería fue la negación del obsequio al cumplir 25 años de trabajo -me niego a considerarlo de servicio- en la empresa. Esta costumbre, consistente en el regalo de un reloj de oro, implantada en la casa matriz de Alemania, aquí fue eliminada. Se supone que se incrementó en la misma cuantía el fondo de reptiles, digo de pensiones, de quienes consiguieron una victoria tan importante.
Me quisieron regalar un reloj de "loro". "No tengas prisa, que cuando lleve los 25 años de antigüedad me regalarán uno en la empresa". Me ha pasado como al gallo de Morón.
¡Ah! y como los sindicatos defienden o no derechos dependiendo de donde están.......pues ajo y agua.
enviado viernes, 12 de octubre de 2007 0:07 por WARRIORV
Y mira tú por donde, en la empresa privada ocurre todo lo contrario. No es que los empresarios o sus sicarios vayan locos por lograrlo, es que han conseguido eliminar la generación de antigüedad. En la empresa donde trabajo, a partir del 1º de Enero del año que viene no se generará más antigüedad por nadie. Quedará congelada. Ni que decir tiene que hace tiempo que los nuevos contratados han perdido ese derecho.
Pero no solo ha sido eso. Hace años que los espléndidos "aguilandos" con que éramos obsequiados para Navidad, pasaron a mejor vida. Tres botellas de vino de la tierra por cabeza, desequilibraban los resultados de la empresa según la dirección.
Pero el paradigma de la racanería fue la negación del obsequio al cumplir 25 años de trabajo -me niego a considerarlo de servicio- en la empresa. Esta costumbre, consistente en el regalo de un reloj de oro, implantada en la casa matriz de Alemania, aquí fue eliminada. Se supone que se incrementó en la misma cuantía el fondo de reptiles, digo de pensiones, de quienes consiguieron una victoria tan importante.
Me quisieron regalar un reloj de "loro". "No tengas prisa, que cuando lleve los 25 años de antigüedad me regalarán uno en la empresa". Me ha pasado como al gallo de Morón.
¡Ah! y como los sindicatos defienden o no derechos dependiendo de donde están.......pues ajo y agua.
enviado viernes, 12 de octubre de 2007 0:07 por WARRIORV
Va de curas
In illo tempore, en vida de mi abuelo Manuel, el de la escursión en busca de té, ocurrióle a éste un hecho que mi señor padre aún se enciende cuando lo recuerda. El abuelo vivía junto a la iglesia. Reza que está construida, toda ella en piedra de rodeno, en el año 1740. En el atrio del altar mayor, había sendas lámparas de latón o bronce colgadas cada una de las columnas correspondientes. Eran grandes, preciosas. En el propio altar, unos candelabros que daban mucha prestancia y realce al mismo, sobre todo los días de las grandes solemnidades en que quedaba todo muy iluminado. Para encenderlos y apagarlos el sacristán usaba un artilugio especial dada la altura a la que quedaban las velas.
Una noche, mi abuelo observó que había luz y se escuchaban ruidos. Previendo, con buen criterio dadas las horas, que fueran ladrones, el hombre entró a la iglesia a ver que pasaba. Cual no sería su sorpresa al ver al cura y al sacristán, con nocturnidad y alevosía, en plena faena embalando las pertenencias más valiosas de la parroquia.
De este modo desaparecieron esas lámparas, los candelabros, los libros del coro antiguos con tapas de cuero, casullas, etc. Todo cuanto tenía algún valor, voló. Más o menos como en todas las parroquias. Aves de rapiña, que siempre se han pasado la vida pidiendo, pero que no respetan la propiedad de las parroquias. Y además, el cura le cogió ojeriza a mi abuelo.
En otro lugar, me han contado que llegó una pareja de refugiados con sus hijos al pueblo. De las tierras del sur o por ahí. Un día, desaparecieron las teclas de marfil del órgano de la iglesia. Como siempre, pocarropa fue el primer sospechoso. Tras dos o tres días de "ablandamiento" tratando de convencerlo de que había sido él, no pudo aguantarlo y dejó viuda e hijos huérfanos. La mujer, con la ayuda de los vecinos -unos más que otros- sacó adelante a sus hijos haciendo todo tipo de trabajos en las casas. Hace poco la ví llorar, recordando esas amarguras.
Y aunque oficialmente nunca se supo la verdad, porque no interesaba, es vox populi que quien presuntamente robó las teclas, fue el propio cura. El cual, con posterioridad, se fue a Mallorca con otro elemento a fundirse las perras en putas
Otro ejemplo que clama al cielo es el de los bienes de las parroqias de la diócesis de Barbastro-Monzón. El bispe de Lérida, se niega a devolverlos. Todos son iguales y estos, catalanes. No hay peor sordo que el que se pone una venda en los ojos.
enviado domingo, 04 de noviembre de 2007 0:09 por WARRIORV
Una noche, mi abuelo observó que había luz y se escuchaban ruidos. Previendo, con buen criterio dadas las horas, que fueran ladrones, el hombre entró a la iglesia a ver que pasaba. Cual no sería su sorpresa al ver al cura y al sacristán, con nocturnidad y alevosía, en plena faena embalando las pertenencias más valiosas de la parroquia.
De este modo desaparecieron esas lámparas, los candelabros, los libros del coro antiguos con tapas de cuero, casullas, etc. Todo cuanto tenía algún valor, voló. Más o menos como en todas las parroquias. Aves de rapiña, que siempre se han pasado la vida pidiendo, pero que no respetan la propiedad de las parroquias. Y además, el cura le cogió ojeriza a mi abuelo.
En otro lugar, me han contado que llegó una pareja de refugiados con sus hijos al pueblo. De las tierras del sur o por ahí. Un día, desaparecieron las teclas de marfil del órgano de la iglesia. Como siempre, pocarropa fue el primer sospechoso. Tras dos o tres días de "ablandamiento" tratando de convencerlo de que había sido él, no pudo aguantarlo y dejó viuda e hijos huérfanos. La mujer, con la ayuda de los vecinos -unos más que otros- sacó adelante a sus hijos haciendo todo tipo de trabajos en las casas. Hace poco la ví llorar, recordando esas amarguras.
Y aunque oficialmente nunca se supo la verdad, porque no interesaba, es vox populi que quien presuntamente robó las teclas, fue el propio cura. El cual, con posterioridad, se fue a Mallorca con otro elemento a fundirse las perras en putas
Otro ejemplo que clama al cielo es el de los bienes de las parroqias de la diócesis de Barbastro-Monzón. El bispe de Lérida, se niega a devolverlos. Todos son iguales y estos, catalanes. No hay peor sordo que el que se pone una venda en los ojos.
enviado domingo, 04 de noviembre de 2007 0:09 por WARRIORV
viernes, 5 de junio de 2009
El nido
En el pueblo, en el corral, las calinroyas han construido su nido. Justo en el espacio que hay entre el apoyo de dos vigas y la viga madre. Tienen cuatro pajarillos que alimentar. En todo el día descansan las dos avecillas. Y los polluelos, parece que han nacido con hambre atrasada pues todo el día permanecen con la boca abierta de par en par; en este caso, el pico.
Una de las cosas que me ha llamado la atención, observándolos sentado en la hamaca con la cámara dispuesta para pillarlos alimentando a las crías, ha sido lo pulcros que son. El pajarillo, alimenta y en vez de retirarse del nido, no siempre claro está, se queda allí y uno de los pollos se ve que se pone con el culo hacia fuera y suelta su cagada. El alimentador ocasional, la coge con el pico, no más el pollo ha acabado de soltarla, y se la lleva fuera. De este modo, la casa permanece limpia. Nunca lo había visto por lo que me llamó poderosamente la atención. Las cardelinas, no lo hacen pues sus nidos aparecen llenos de excrementos por los bordes cuando los pollos han abandonado el nido.
Es época de eclosión de crías de todas la aves que por el pueblo pululan. Gorriones, tordos, calinroyas, chillandras...... De estas últimas, tambien hay otro nido en el umbral de la puerta de entrada al corral. Este no se ve, pero se ve a los pájaros entrar entre dos vigas del mismo. A todos se les ve con comida en el pico, en los alambres de la luz o en los tejados. Solo hay que sentarse y seguirlos con la mirada para saber donde tienen el nido.
jueves, 4 de junio de 2009
Dudas
En medio de un mar de dudas y miedos, al tiempo que con la determinación tomada, inicio una nueva bitácora. El tiempo nos descubrirá poco a poco sus designios y determinaciones.
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