Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

jueves, 19 de febrero de 2009

Fuego



Fuego en el alma, fuego en las venas, fuego en el sexo.

Fuego en el alma
genera tu ausencia
llama abrasadora
aviva, tu presencia.

Tu cuerpo se destapa
el fuego lo consume
cuando abres tu capa
se incinera, vive.

Fuego en tu sexo
manjar aureolado
botón de dicha
de bosque circundado
puerta del cielo
a mi ser alborotado,
servirá de nexo
al sueño consumado.

Fuego en las venas
y ardiente espera
borbotones de vida
me pides, fuera.