Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

domingo, 19 de abril de 2009

caperucita

¿Dónde vas Caperucita
con tu cestito tan lleno?
Voy a casa mi abuelita
a llevarle miel y tortas.
Si quieres niña, los dos iremos
por distintas sendas
a ver cual llega el primero.
El lobo como es tan pillo
de un salto fue a la casita
tragándose de un bocado
a la enfermita abuelita.
Llegó la niña, se la comió
pero por malo, se reventó.



(Esto es una canción que mi madre suele cantar a los niños y ahora,¡cómo no!, a su bisnieta. Tiene un tono lastimero, que a mi no me gusta; como música no se, que cada cual adapte su estilo).