Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

sábado, 27 de junio de 2015

COCINA DE AUTOR

ARROZ CALDOSO DE PESCADO (más bien marisco)


Hoy traigo al blog otro arroz que hago cuando tengo okupas en casa. Se trata de un arroz presuntamente caldoso, que acaba siendo seco, pero que no desmerece en sabor y apariencia.

El preparado el pasado domingo, contenía una sepia mediana, seis gambas gordas o grandes, mejillones de la bahía del Los Alfaques, y una bolsa de almeja italiana de granja. Podríamos añadir galeras, cigalas, langostinos, berberechos, chirlas.... pero en definitiva o debería ser en pequeña cantidad o eliminando otros componentes. También en vez de agua podría confeccionarse con fumet de pescado. Pero no lo considero necesario en esta cantidad, salvo que tengamos alguna espina o cabeza de pescado y lo aprovechemos para ello.

Utilicemos un recipiente apropiado, olla o sartén. Yo utilicé una sartén plana grande adecuada para este menester, Se ve en la foto. Puesta al fuego con un buen chorro de aceite virgen de oliva; salar las gambas y una vez cogido color por ambos costados, las reservo en un plato; añado cebolla, picada fina y un diente de ajo también picado. Cuando coge color la cebolla, añado tomate natural cortado a cuadritos o rallado. Rehogo y cuando está el tomate a punto añado la sepia previamente cortada a cuadritos o como le guste al fabricante.

Salteada la sepia, añadimos las conchas: mejillones y almejas. Abiertas las conchas, podemos dejar todo preparado y listo para añadir el arroz con posterioridad. Yo me fui a la playa. De vuelta, caliento el guiso y añado y sofrío el arroz con el marisco. Dos puñados generosos de arroz por persona. En este caso, en un vaso comparo el arroz que voy a añadir para poner el doble de agua. Rehogado bien el arroz, añado el caldo o agua. Y azafrán. Aprovecho que todavía esta el caldo templado para eliminar parte de las cáscaras de los mejillones, así se "lavan" y dejan la sustancia y no saturan el arroz de cáscaras. No olvidar las gambas, añadir a mitad de cocción.

Como es sabido, el arroz con poco más de 15 minutos está cocido por lo que podemos echarle un vistazo y según esté de cocción, lo apagamos y dejamos reposar para que termine el punto. Dos cosas a tener en cuenta: la sepia normalmente lleva sal, así que no hay que ponerle y además habrá de tenerse en cuenta al comprobar el punto de sal del guiso. Otra, si picamos un diente de ajo en el mortero y con caldo antes de que se seque el arroz, lo mezclamos y añadimos por encima, da un gusto muy aparente. Si no te gusta el ajo, no lo pongas. Y yastá.
 





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miércoles, 24 de junio de 2015

DIA DE ENRAMADAS

Hoy, día de san Juan, era día de enramadas en los pueblos de la comarca del Jiloca. Un tronco de árbol adornado con motivos diferentes en la punta, a modo de ramaje, era plantado por los mozos en la plaza del pueblo. Cuando yo era muy crío, en la replaceta de casa plantaban una los mozos de la casa vecina, eran varios y muy "chulillas". Luego la recuerdo en la fuente, junto a las escuelas. Siendo yo mozo, o pretendiendo serlo, un año intentamos plantarla. Éramos pocos y se nos apoderó quedando reposada en el vecino tejano y de resultas, dejamos a todo el pueblo a oscuras. Ya conté anteriormente esta odisea así como lo ocurrido una noche con la chica de la mochila azul. He buscado en internet una foto alegórica pero no hay nada que se le parezca; son otra cosa.

Lo que quería contar es que en el día de hoy, en mi cocina, "se ha puesto el sol" a las 20:25 horas. A partir de ya, cada día irá acortándose un poco la luz solar. Vamos hacia el invierno cuando recién acaba de comenzar el verano. Recordando el frío del mes de Enero, bendigo este calor que no es tal dentro de casa y no digo nada en el jardín, donde para echar la siesta debo abrigarme la barriga pues el jodido aire de ponent -no sé porque le llaman así pues procede del sur- resulta molesto. En fin, disfrutemos del verano antes de que haya pasado.

lunes, 22 de junio de 2015

COCINA DE AUTOR

NATILLAS DE CALABAZA


Resultado de imagen de calabazas amarillas

Hoy tengo natillas de calabaza. Lamento no tener unas fotos pues son lo que mejor ilustran un plato, no obstante, aporto los restos de la gran olla, en cuenco sopero, que servirá para degustar hoy a la hora de la comida. Les llamo natillas, por el color y la consistencia del puré. En la foto, recién sacado de la nevera, el puré es más espeso que en caliente y como todo, en el equilibrio está el punto aunque para los gustos los colores. A mí, me gusta que no sea sopa.

El ingrediente principal es la calabaza que llaman de violín. De ahí el color del puré. También un calabacín verde, tamaño normal. Unas zanahorias, y patata. Todo en función de la cantidad que queramos obtener. A la olla le añadimos el agua para hervir en razón de la verdura aportada. Normalmente que cubra los ingredientes cortados en trozos grandes. Sal.  A veces, si tengo una lechuga en la nevera, le quito las hojas exteriores que no estén podridas y las añado. Nunca pongo otras verduras aunque mi madre pone cebolla (no me gusta cocida, quizá sea manía pues en otros guisos me encanta. Mi señor padre, odiaba los ajos cocidos y en el alioli los comía crudos), judías verdes.....

Puesta la olla rápida al fuego, vamos añadiendo los ingredientes. Tapamos y cuando ya haya hervido diez minutos, apagamos y la dejamos terminar. Quince  minutos y abrimos. Si creemos que hay mucho caldo, reservamos en una taza el que resulte sobrante para añadir al gusto.

Entre tanto hierve, o después, colocamos al fuego una sartén pequeña con una ración generosa de aceite de oliva virgen. Al menos seis cucharadas soperas. Un ajo en filetes cuando el aceite está a punto, sin que se quemen. Cuando ya el ajo está a medias, pasamos por el aceite dos o tres rodajas de pan de un cm de grosor, por lo menos, y lo doramos. Le dan un toque. Añadimos a la olla ya apagada y abierta. Una chorrada generosa de leche, sin pasarse, y cuatro lonchas de queso fundido.

A continuación con una batidora de mano, trabajamos bien las verduras hasta que quede un puré fino en el cual prácticamente no se distingan los ingredientes. Si tengo pan tostado, añado un par de láminas en mi ración. Me encantan esos zancochos. Ese cuenco, siempre me lo zampo lleno y no repito, por vergüenza.



ALECCIONADOR







sábado, 20 de junio de 2015

viernes, 19 de junio de 2015

¡AY, CARMENA!


 
CristiNAZIfuentes
 

Tras la Gürtel indecente,
tras Granados y sus pillos,
tras la chusca gestapillo,
tras recortar a la gente
sus derechos evidentes,
tras infligir tanto daño,
la aritmética de escaños
ofrece como resumen,
¡no me cabe en el cacumen!,
el PP otros cuatro años.
Spinela | @laespinela

 

jueves, 18 de junio de 2015

DELINCUENTES SEPARATISTAS (QUE NO INDEPENDIENTES)

A raíz de la nueva moradora en casa, la perrita Laika, he descubierto los inconvenientes, peligros y pájaros de mal agüero, no presuntos sino reales, pues delincuente es todo aquel que incumple la ley, que me rodean. Como cada poseedor de una mascota, la saco a la calle con la intención de que el animal haga sus necesidades -en el caso de un cachorro como la mía, para que aprenda y se acostumbre-. Pero lo que no esperas es tropezar con energúmenos creídos en la supremacía local sobre quienes hemos tenido la osadía de gastarnos nuestros dineros en beneficio del progreso de esta tierra. Entienden que seguimos en el medievo cuando los señores imponían el vasallaje y la esclavitud sobre los demás. El día menos pensado, impondrán el derecho de pernada.

El sábado me encontraba en la parcela contigua a mi casa cuando de pronto apareció un enorme perrazo negro, un rottweiler, que persiguiendo a mi cachorra hizo caso omiso a las llamadas para que se detuviera. Esta inició una carrera desenfrenada hacia casa encontrándose la puerta cerrada, culpa mía. Se refugió en el exterior de la puerta del vecino, ocupada por otro perrazo, un labrador negro y una coker. La pobrecica entre los ladridos de los de dentro y el acoso del perseguidor no cesaba de ladrar quejándose. Menos mal que no le mordió sino la mata. El kabrón del dueño se marchó tal feliz, era el puto dueño del corral.

Ayer, volvimos a tropezar con ellos en la calle. En cuanto nos vio, el perro vino hacia la perra. Intenté alejarle con un palo que llevaba en la mano. Inútil. La perrita acosada y acojonada, ingobernable. Gritos e insultos entre ambos dueños; recriminación por llevarlo suelto y sin bozal. El muy kabrón me amenazó e insultó dejando entrever que el perro me podría atacar y después él.

Hacía cinco minutos que había hablado con una patrulla de la policía local denunciando los hechos. Pero en ese momento no estaban, como siempre cuando los necesitas. Llamé a la centralita donde supongo que una vez terminada la llamada me mandarían a tomar por culo, "que se joda el español".

Y ahora me planteo ¿Qué cojones hago? ¿Salir a pasear con la perrita asumiendo el riesgo de ataques de perro y dueño o quedarme en casa en previsión de esto pueda ocurrir? Si tuviera escopeta, las disyuntivas estarían más diáfanas.

domingo, 14 de junio de 2015

COCINA DE AUTOR

ARROZ DOMINGUERO

 
 
 


Desde hace años vengo preparando con asiduidad lo que yo denomino arroz dominguero y que sobre todo a mis hijas, les encanta. Es un arroz que pretende ser caldoso pero que siempre acaba siendo, por c o por b, semiseco. No obstante, a la pequeña, siempre le guardo un tuper por lo que siempre, hago laaaaargas las raciones para que sobre.

Los ingredientes suelen ser: costilla de cerdo, conejo y pollo, en cuanto a carne. Verduras: judía verde, pimiento rojo, tomate, y en temporada, alcachofas.

Costilla de cerdo cortada a cuadros, unos 200/250 gramos para cuatro personas. Conejo, troceado, normalmente utilizo la parte delantera.  Pollo, a poder ser amarillo o de corral. Saco las pechugas pues la carne resulta jasca y los muslos a veces también los reservo. Las alas junto con la carcasa del cuerpo la añado.

Sazono la carne con generosidad, cosa que hay que tener en cuenta a la hora de probar el salazón del caldo. Saltear primero la costilla junto con un par de dientes de ajo; cuando haya cogido color, añadir el pollo y el conejo también hasta que tome color. Añadir las judías troceadas, si son anchas, cortar por medio con una puntilla o cuchillo pequeño. Cortar el pimiento en cuadritos pequeños, añadir y rehogar todo. Añadir el tomate cortado a trocitos o rallado (mejor natural, maduro). Una ramita pequeña de tomillo del terreno que solo haga vislumbrar el aroma del mismo. Una vez sofrito todo, primera foto encima del texto, añado agua en consonancia con el resultado final y ¡azafrán!. Foto de en medio

Hierve todo unos 30 minutos tras los cuales limpio las alcachofas y las agrego. A continuación, unos cinco minutos y añadir el arroz. Dos puñados de arroz, generosos y algo más si queremos que sobre, por persona y quince minutos hirviendo y cinco de reposo y ¡¡a comer!!

Como no es paella, en la cual el agua es doble del arroz y queremos que no sea seco, deberemos tener en cuenta las raciones que deseamos salgan y para ello el caldo necesario equivalente al arroz que hayamos de añadir.

sábado, 6 de junio de 2015

COCINA CREATIVA


Mi comida para hoy.

Hallándome cabizcundo y meditabajo y bajo la influencia de una lata de birra de medio litro, todo hay que decirlo, me he planteado que podía hacer hoy de menú wonderful.

Antes había ido a dar un paseo con mi chica y fruto de este tiempo loco pero maravilloso que disfrutamos, hemos vuelto los dos con la lengua fuera pero ella en el jardín se ha desquitado con creces del calor solar.

Bueno pues a lo que volvíamos. Tras amplia consulta conmigo mismo y como la kabra siempre tira al monte (si alguien piensa lo otro, lo mismo le deseo), o sea a la comida de plato, he recordado que tenía salmonetes y medio conejo en la nevera. Después de un tira y afloja conmigo mismo, he decidido preparar unas patatas con conejo.

Con tres tajadas de la parte delantera, he iniciado el guiso. Saltear el conejo y añadir unas tiras de pimiento rojo y medio tomate de pera, que hoy en día es el único comestible. Rehogar y añadir las patatas cortadas a cachos. Dos alcachofas que tenía por la nevera las he añadido antes de que se echaran a perder. Cubrir con agua suficiente pero no demasiada, pues no añadiré arroz. Una pizca de estarlux para potenciar el sabor. Y un secreto: azafrán de mi tierra, bien picado en el almirez; no echado en hebras que no da color ni sabor, lo digan Arguiñano o Can Cortés. Al final, a la hora de apagar, hago un hueco y añado un huevo escalfado. No sale en la foto pues la hice antes. He comido mejor que los reyes católicos.