Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

martes, 5 de enero de 2016

STAR WARS

¿Porqué no podemos expresar nuestros sentimientos sin miedo a que alguien perverso haga uso de ellos de forma delictiva y torticera? Me gusta el vecino del 5º o la mujer que veo todos los días en el tranvía o sigo enamorado de una chica de 19 años que hoy tiene taitantos por no hablar de tantas y tantas tías buenas buenísimas con las que intentan chantajearnos (o tíos buenorros que haberlos haylos).... Hace años cree y con posterioridad eliminé un blog desesperado en el cual plasmaba el momento febril que atravesaba por culpa de ésta última. Tuve contactos con personas a través de internet con las cuales mantuve el criterio de que todos buscábamos algo, quizá sin saber qué, cuando navegábamos por procelosos mares. Siempre lo negaban pero, no obstante, seguían navegando en busca de un puerto que las cobijara.

Siempre he pensado que los poetas son, en su mayoría, personas con traumas internos que hacen sufrir a esas mentes, por otra parte privilegiadas. Hasta a mí, que de poeta tengo la aversión a Alberti cuando recitaba alguno de sus poemas, en algún momento me ha venido la pejiguera de intentar hacer alguna vaina de esas juntando versos, sin resultado, claro. Nunca debí ir a Madrid.

Yo también tengo mis traumas y quimeras y quien crea estar libre de ellos, que tire la primera piedra.