CAMINO DE HIERRO, sendero de barro
SUEÑOS Y QUIMERAS DE UN DESERTOR DEL ARADO.
Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.
lunes, 5 de febrero de 2018
Laika, mi amor
Nunca pensé que pudiera llegar a amarte tanto, petisuí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario