Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

martes, 9 de enero de 2018

EL PLATO DE LENTEJAS


Aquel día pudo cambiar la historia. Quizá sería arriesgar demasiado afirmar que pudo hacerlo la humanidad, pero sin duda, sí la historia que nos contaron en la escuela de principios de la segunda mitad del siglo veinte.