Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

viernes, 9 de noviembre de 2018

LA SOLEDAD DEL BLOGERO

Aunque más correcto sería decir "la soledad de internet". Esta reflexión viene a cuento de mi propia experiencia consuetudinaria en relación con la red. Poco a poco se van cerrando y estrechando los cauces por los que discurre la conexión con el mundo exterior.