Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

miércoles, 26 de junio de 2019

EL VIAJE


Llevaba tiempo planeando que debería tomar unas vacaciones pero no acababa de decidirse. ¿A los países orientales, últimamente tan de moda? ¿A la Ribera Maya o a la República Dominicana? ¿Por qué no a Canarias, que está más cerca y no es necesario salir de España? Había recogido folletos de varias agencias de viajes pero no acababa de elegir un destino.

Luego estaba la dirección del negocio ¿serían capaces los operarios de gestionarlo por sí mismos? Cierto que Vicente, el encargado, llevaba años trabajando y conocía todas las triquiñuelas del mismo mejor que él, y además, trataba directamente con los proveedores con lo cual, nadie le echaría en falta. Más que necesitarlo a él el negocio, era al contrario, se creía don preciso, olvidando que éste, hacía años que había muerto.

Así que esa tarde noche, agarró al toro por los cuernos y volvió a repasar por enésima vez los folletos. Como iría solo, mejor elegir un país donde no tuviera problemas de idioma. ¿Solo? una idea descabellada rondó su cabeza ¿Y sí ..? No, no, faltaría más, pero hay gente que lo hace y yo no tengo ninguna obligación con nadie. Bah, te estás volviendo majara Aniceto, a quién se le ocurre, si tu madre se entera te niega el saludo. Bueno, quizá una vez en el destinooo. Decidido a tomar una decisión, se fue a la cama más que satisfecho.

Iría a Cuba, sobre todo por llevarle la contraria al trompas americano. Quince días inolvidables recorriendo la isla y fumando puros. De los de Isidoro, con vitola de oro. A los dos meses de la vuelta, recibió un telegrama: «Tienes que volver, estoy embarazada de mellizos».

El teléfono insistente lo despertó. Estaba a punto de sufrir un colapso mental, corporal o de lo que fuera.

—Oiga, ¿pero viene o qué? Llevo una hora esperándole en el aeropuerto y hay que embarcar en media hora.

—Lo siento señorita, haga usted el viaje sola, o cancele el vuelo; no me encuentro bien. Si es necesario la indemnizaré.

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