Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

jueves, 22 de octubre de 2020

REACCIONES

 Al relato de octubre. Entrada con título "Calaveras"

No es necesario inventarse truculentos episodios pues el día a día se empeña en brindarnos ejemplos que nos llenan los ojos de lágrimas y el corazón de congoja.

 Hoy, acaba de fallecer víctima del virus, una prima hermana menor de 70 años. En la UCI desde el mes de agosto, no ha podido resistir el embate de esa tremenda maldición que nadie sabe cómo ni de dónde ha salido y que hasta este momento ha llenado al mundo de temor y muertos. La paradoja es que el marido ingresó en el hospital unos días antes y nadie hubiera apostado por él. Ella deseaba contagiarse, cuando ya lo estaba, para pasarlo los dos a la vez. Él volvió a casa a los diez días, ella, no volverá nunca. A.B.