Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

sábado, 10 de septiembre de 2022

CHARLES the THIRD

 El rey Carlos III, durante su discurso tras la proclamación oficial como rey de Inglaterra en el palacio de Saint James.

No tenemos nada en común, pero a pesar de ello, no me cae mal pero guardando las distancias. Sus peripecias amorosas son de sobra conocidas así como sus fracasos. La aplicación del refrán "tira más un pelo de coño, que veinte mulas", es de óptima aplicación para este nuevo rey. No en vano quería ser el tampax en el de su amante, y luego esposa, Gloria Camilla.

Ha tenido una paciencia jobbiana; la recién fallecida reina, su madre, se propuso morir con la corona puesta y lo ha cumplido. Menos mal que no ha aguantado tanto como su abuela, de él, que llegó a centenaria. El pueblo, tan dado a las lágrimas, la pérfida Albión no es diferente, llorará su desaparición pero no cabe duda que en el ánimo del rey Charles, habrá cundido un inmenso alivio pues ya se veía abdicando en su hijo antes de heredar la corona.

Una parte muy importante del United Kingdom no volverá a ver otro rey, o mejor dicho, es la primera y la última vez que ven una nueva coronación. Setenta años de la anterior y a esperar la próxima, que a poco que aguante Carlos, no volverán a contemplar. Y el resto tampoco.

Quizá la benevolencia con la que trato a Charles sea a causa de lo único que nos une: es quinto mío, él, algún mes más joven. Pero tampoco es patente de corso.

Las actitudes que se le han visto en la tele a la hora de firmar papeles, dicen muy poco a su favor. Tics de Enrique VIII. Muy mal comienza, despidiendo a más de cien sirvientes antes de ser confirmado sucesor. 

Una profecía cumplida a medias, de momento. Todo comenzó el 7 de junio, cuando Logan Smith aseguró en su cuenta de Twitter: 

 La Reina [Isabel II] muere el 8 de septiembre de 2022".

 y el rey Carlos moriría el 28 de marzo de 2026


No hay comentarios: