Todas las reglas tienen excepciones; hasta en política se produce una muy de ven en cuando: Mijail Gorbachov fue una de ellas. En un país de dictadores que asesinaron a millones de personas, Stalin fue uno de ellos, surgió un dirigente que llegado a la cúpula del estado como máximo dirigente, lejos de actuar como lo hacen los dictadores y los que aspiran a serlo, consiguió con su actitud y directrices, cambiar el rumbo de lo que Europa había sido tras la guerra mundial.