Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para callarse.

lunes, 24 de octubre de 2022

FLÜCK

Cuando en los albores del fin de la dictadura y tras las elecciones, la oposición se centraba y cebaba en exigir al presidente del gobierno, señor X, que explicara cuantos dineros le habían entregado los alemanes, en concreto un tal Flück, para poder gastarlos en las elecciones y ganarlas. En las cortes, respondió airado a quienes le interpelaban con un negativo argumento: "ni Flück ni Flock".