Una constructora con ínfulas de prima donna. Gonzalo Urbizu, un arquitecto todavía con más infulas y que han demostrado, los dos, empresa y arquitecto, ser lo que no debieran. Unos inútiles irresponsables. Han construido una urbanización en Zaragoza, llena de imperfecciones, impropia de las cantidades dinerarias que han percibido por ella. Un individuo que en teoría vive en Zaragoza y que ha ignorado el fuerte cierzo que sopla por estos lares, se merece el destierro y que le quiten la licencia y el título.
Una empresa que se lo ha consentido, unos funcionarios que no han sabido o querido ver los desafueros cometidos por el arquitecto, deberían ser expulsados sin misericordia y enviados a hacer compañía en el destierro a este individuo. Está visto que el rey sigue desnudo porque hay demasiado inútil haciéndole la ola. Clama al cielo.
El tercero en discordia es una constructora, dicen que navarra aunque eso ni quita ni pone rey. Es una cuestión difusa adjudicarle responsabilidades aunque las tiene. Digo esto por la maraña de subcontratas en las que caen todas las empresas adjudicatarias de obras; en última instancia, esta empresa es la responsable de toda la obra. Y clama al cielo que TODOS los cristales de las ventanas estén rayados, no sucios lo cual sería normal, rayados. Un desastre de construcción de la cual es responsable quien generó el proyecto: Gonzalo Urbizu.
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